El expresidente Álvaro Uribe se reunió con la comunidad de Robledo en Medellín, donde expresó su preocupación por el deterioro del país, afirmando que «afecta por igual al rico y al pobre, y más al pobre». Hizo énfasis en los efectos de las reformas laboral y de salud, señalando que muchas empresas ya deben asumir costos adicionales para la salud de sus trabajadores debido al debilitamiento del sistema.
Uribe criticó la orientación actual del gobierno y destacó la importancia de defender los valores familiares: “Respeten a todo el mundo… pero respeten la familia, respeten al niño, respeten las edades de la naturaleza”. Asimismo, mostró su descontento por la posible eliminación del régimen simple, que ha beneficiado a los pequeños comerciantes y tenderos.
De cara a las próximas elecciones, Uribe fue enfático en la necesidad de un gobierno que corrija errores pasados y cambie el rumbo actual. Llamó a evitar el odio hacia el presidente Petro, subrayando que es más útil estudiar razones de oposición: “No gastarle tiempo odiar al presidente Petro es inútil… eso quita el raciocinio, amarga el corazón”.
Finalizó agradeciendo a los asistentes y animando a seguir trabajando por un cambio en las próximas elecciones: “Hay que prepararnos para ganar, pero que no gane uno de nuestros compañeros, que gane Colombia”.