En el programa Especiales IFMNOTICIAS, Stefanía Fernández, responsable de Sostenibilidad y Diversidad en Comfama, compartió la visión transformadora con la que la organización antioqueña ha integrado la naturaleza como componente esencial del bienestar humano. Con 71 años de historia en el sistema de compensación familiar, Comfama avanza hacia un modelo que va más allá del enfoque económico y social, y que ubica al medio ambiente en el centro de su estrategia.
“La relación entre salud humana y ecosistemas es inseparable. No hay bienestar si no hay naturaleza”, afirmó Fernández, al explicar cómo la entidad ha incorporado la regeneración ambiental y la educación ecológica como pilares de su acción.
Una de las apuestas más destacadas de Comfama es la creación de siete “Parques Bosques”, como el parque Cerro Tusa, concebidos no solo como espacios de recreación, sino como ecosistemas estratégicos para la conservación de la biodiversidad. Estas zonas, explica Fernández, están diseñadas para ofrecer experiencias significativas de conexión con el entorno y educar a los visitantes sobre la importancia de su cuidado.
“La naturaleza impacta directamente en nuestra salud física y mental. Estudios científicos han demostrado que estar en contacto con el entorno natural mejora el sistema inmunológico y reduce el estrés”, señaló.
Fernández también enfatizó el concepto de Una sola salud, enfoque que reconoce la interdependencia entre la salud humana, animal y ambiental. A propósito, menciona la pandemia de COVID-19 como una muestra clara del impacto que tienen los desequilibrios ecológicos sobre la salud pública.
“La prevención también pasa por crear hábitos cotidianos saludables, como caminar en la naturaleza. Es una práctica que nos cuida física y emocionalmente, pero también nos hace más conscientes del territorio que habitamos”, indicó.
La gestión ambiental de Comfama incluye un componente técnico: el monitoreo y levantamiento de inventarios de biodiversidad. A la fecha, la caja de compensación ha identificado cerca del 36 % de las especies de aves registradas en Colombia dentro de sus parques, un dato que resalta la riqueza natural del país, considerado el más biodiverso del mundo por kilómetro cuadrado.
“Este trabajo nos permite generar datos, pero también conciencia. La gente valora lo que conoce, y ese conocimiento debe estar al alcance de todos”, apuntó.
Fernández resaltó la importancia de las alianzas con empresas, academia y otras entidades para el desarrollo y sostenibilidad de estos espacios. Además, destaca programas como Juguemos en el Bosque, una iniciativa de educación ambiental orientada a niñas, niños y jóvenes, en la que se combina el ocio con el aprendizaje en medio del bosque.
“Queremos formar generaciones que no vean la naturaleza como algo ajeno, sino como parte de su vida y su bienestar”, expresó.
Finalmente, reconoce que uno de los mayores retos de este proceso es integrar disciplinas como la ciencia, la economía y el ámbito social, para lograr una sostenibilidad verdaderamente integral. Subraya, además, la necesidad de democratizar el conocimiento científico y acercarlo a la ciudadanía.
“Tenemos que hablar de ciencia de manera clara y accesible, porque cuidar el planeta es una tarea de todos”, concluyó.
Vea la entrevista: