El clásico por posición en la tabla de los dos equipos y por la nómina titular de ambas escuadras, presagiaba un gran encuentro futbolero, pero todo fue solo ilusión. El nivel mostrado hoy en una cancha maltratada por el último concierto, fue muy pobre. Pases erráticos, malas definiciones y rojas infantiles, podrían resumir el encuentro entre Deportivo Independiente Medellín y Atlético Nacional.
En el primer tiempo, Medellín fue más punzante y llegó varias veces al arco de la visita, pero la falta de definición facilitó el trabajo defensivo de Atlético Nacional. A pocos minutos de finalizar la primera etapa, Billy Arce fue derribado en el área luego de recibir una carga por la espalda, penal claro que convirtió en gol Edwin Cardona.
Para la segunda parte, Nacional pareció tomar el dominio del juego y se veía cómodo en la cancha, tanto así que se dio el lujo de errar varias veces con el arco a su disposición. Y cuando Medellín parecía sacudirse, llegó la jugada infantil de Francisco Chaverra. El lateral le propinó un codazo al jugador Asprilla de Nacional, el juez central en primera instancia no se percató, pero el VAR sí. Roja y el DIM quedaba con 10 hombres y para rematar, minutos después Leyser Chaverra salió lesionado y no quedaban más cambios, y así el rojo quedaba con 9.
Luego, León y Campuzano protagonizaron un choque que tuvo como protagonistas los empujones y agarrones de camiseta que derivó en roja directa para ambos. Medellín tenía ahora 8 jugadores en el campo y Nacional 10.
Y así y todo, con 8 hombres, el Deportivo Independiente Medellín encontraría el empate que terminó con celebración hasta horas después del pitazo final. Fue un 1-1 emocionante para unos, triste para otros y con una deuda inmensa en fútbol para todos.
