El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, cuestionó públicamente al Gobierno Nacional y responsabilizó al presidente Gustavo Petro y a sus funcionarios por lo que pueda ocurrir durante las marchas convocadas para este viernes en la ciudad. En su pronunciamiento, el mandatario local denunció una supuesta intención del Ejecutivo de “activar las primeras líneas para incendiar la ciudad” y afirmó que el Ministerio del Interior citó a una reunión en el Politécnico Jaime Isaza Cadavid, lugar desde donde, según él, iniciaron y finalizaron las movilizaciones recientes que derivaron en actos de vandalismo.
Gutiérrez aseguró que “el desgobierno Petro solo se acuerda de Medellín para verse con bandidos en el ‘Tarimazo’ y para activar las primeras líneas”. Añadió que la convocatoria desde el Ministerio coincide con el llamado a marchas programadas para el día siguiente, cuyo recorrido termina también en el Politécnico. “He dado instrucciones de que nadie de la Alcaldía de Medellín va a esa encerrona. Con mucho gusto serán atendidos en la Alcaldía. Es más, están invitados al PMU para hacer seguimiento a las marchas que ustedes mandaron a hacer para generar desorden”, expresó el mandatario.
El alcalde insistió en que el Gobierno debe “dejar de incitar al odio” y pidió respeto por la ciudad. “Hago responsable a Petro y a sus funcionarios de lo que pueda ocurrir mañana en Medellín. Dejen tranquila a Medellín y a Colombia entera”, puntualizó.
Este pronunciamiento se suma a las declaraciones que Gutiérrez realizó el pasado 8 de octubre, tras los hechos de violencia registrados en el sur de la ciudad durante una manifestación. En esa ocasión, el alcalde afirmó que el Gobierno Nacional buscaba intervenir en las decisiones de Medellín “con la excusa de lo ocurrido durante la jornada de violencia y vandalismo que generaron sus amigos”.
Según su versión, el jefe de Estado planeaba crear una comisión a nivel nacional “para presionar y evitar que se pueda defender a la ciudad de los violentos”. Gutiérrez señaló que durante esas jornadas las autoridades locales actuaron para proteger a familias y menores de edad que estaban siendo intimidados en establecimientos comerciales. “Ayer defendimos a niños y familias completas que estaban en McDonald’s siendo intimidados por los amigos de Petro. Su odio por Antioquia, Medellín y nuestra gente no tiene límites. Resistiremos y Colombia y Medellín saldrán adelante”, manifestó entonces.
Sectores políticos y analistas en la ciudad interpretan estas acciones del Gobierno Nacional como una forma de presión y amedrentamiento contra Medellín y Antioquia, y especialmente contra sus principales líderes locales y departamentales, Federico Gutiérrez y Andrés Julián Rendón, quienes se han mantenido en firme oposición a las políticas del presidente Gustavo Petro.