El Estadio El Campín, emblemático recinto deportivo de Bogotá, está a punto de experimentar una transformación radical.
El Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD) firmó un acuerdo con el grupo constructor Sencia, marcando el inicio de un proceso de remodelación que se extenderá por tres años y medio. El objetivo es convertir este estadio en un punto de referencia no solo para el deporte, sino también para actividades recreativas y culturales.
Édgar Cardona, director del proyecto, compartió detalles sobre esta ambiciosa obra en una reciente.
«El proyecto Sencia consiste en una Alianza Público-Privada, donde el IDRD nos entrega el predio para hacer una transformación integral del polígono, con el fin de ofrecer a los bogotanos un espacio mejorado para disfrutar de diferentes actividades, no solo deportivas», indicó Cardona.
Cambios significativos para un estadio de última generación
Entre los cambios más destacados que se implementarán en El Campín, Cardona mencionó la adaptación del estadio a los estándares requeridos por la Conmebol.
«Lo ideal es contar con una plataforma de ingreso que facilite el acceso al segundo piso, mejorando la comodidad y el flujo de personas en las graderías. Además, será un estadio totalmente cubierto con capacidad para 50.000 asistentes», explicó el director.
Esta remodelación tiene como propósito transformar El Campín en un espacio multifuncional. «No solo buscamos que sea un referente deportivo, sino también cultural y recreativo, permitiendo que las familias disfruten de sus instalaciones», añadió Cardona.
Un ejemplo de esta multifuncionalidad es la agilización de los preparativos para eventos culturales; «con el nuevo estadio, el montaje de conciertos como el de Paul McCartney podría reducirse significativamente, sin afectar los partidos de fútbol», apuntó.
Impacto en Millonarios y Santa Fe
Una de las preocupaciones que ha surgido en torno a la remodelación es cómo afectará esto a los dos grandes del fútbol bogotano: Millonarios y Santa Fe, que juegan sus partidos como local en El Campín. Cardona se refirió a este tema, asegurando que se está revisando un contrato junto a los abogados de los equipos. «Ellos tienen inquietudes, especialmente durante la etapa de construcción, pero es evidente que debemos realizar las obras por partes para no interrumpir la actividad futbolística durante estos tres años», afirmó.
Se estima que el aforo del estadio podría reducirse a unas 20.000 personas mientras se llevan a cabo las obras, pero se garantizará la capacidad de 50.000 asistentes al finalizar la remodelación.
Un cronograma ambicioso
El cronograma de trabajo, que comenzará en diciembre, está claramente definido. «Durante el primer año construiremos la gradería oriental, luego nos enfocaremos en las graderías sur y norte durante el segundo año, y finalmente, en el tercer año, abordaremos la gradería occidental. A partir de allí, planeamos construir el techo en un plazo de seis meses», detalló Cardona.
Con esta transformación, El Campín se prepara para convertirse en un estadio de última generación que no solo elevará la experiencia del espectador, sino que también consolidará su lugar como un ícono del entretenimiento en Bogotá. Sin duda, esta remodelación representa un paso audaz hacia el futuro del deporte y la cultura en la capital.