La Registraduría Nacional del Estado Civil es una entidad autónoma del Estado colombiano encargada de funciones que atraviesan la vida civil de las personas y el funcionamiento del sistema democrático.
Su labor abarca desde el registro de hechos vitales como nacimientos y defunciones, hasta la organización integral de los procesos electorales y los mecanismos de participación ciudadana.
En materia electoral, la Registraduría tiene a su cargo la planeación y ejecución de cada jornada de votación. Esto incluye la elaboración del calendario electoral, que fija fechas y etapas de los distintos procesos.
Para las elecciones de 2026, el registrador nacional, Hernán Penagos, se ha encargado de llevar el cronograma oficial que orienta tanto a autoridades como a partidos y ciudadanos. La entidad también define y habilita los puestos de votación en todo el territorio nacional y en el exterior, así como la logística necesaria para su funcionamiento, entre ella la impresión de tarjetas electorales, la disposición de urnas y la provisión de herramientas tecnológicas para el preconteo y la transmisión de resultados.
Otro de los ejes centrales de su trabajo es la administración del censo electoral. La Registraduría conforma, actualiza y depura la base de datos de ciudadanos habilitados para votar, y coordina los procesos de inscripción de cédulas, especialmente para quienes cambian su lugar de residencia. Este censo sirve como referencia oficial para garantizar que el derecho al sufragio sea ejercido por quienes cumplen los requisitos legales.
Durante la jornada electoral, la entidad designa a los jurados de votación y se encarga de su capacitación. Además, realiza el conteo preliminar de los votos y organiza la documentación que posteriormente es revisada por las comisiones escrutadoras. A su vez, recibe y formaliza la inscripción de candidatos de partidos, movimientos políticos y grupos significativos de ciudadanos, asegurando que cumplan con los requisitos establecidos por la ley.
La Registraduría también organiza otros mecanismos de participación ciudadana, como consultas populares, revocatorias de mandato y elecciones de consejos de juventud. Estas funciones refuerzan su papel como garante de escenarios en los que la ciudadanía interviene de manera directa en decisiones públicas.
Más allá del ámbito electoral, la entidad administra el registro civil de todos los habitantes del país. Según el Decreto 1010 de 2000, le corresponde garantizar la inscripción confiable de los hechos y actos sujetos a registro, expedir copias de registros civiles y custodiar la información asociada. Asimismo, asigna el Número Único de Identificación Personal (NUIP) al momento del nacimiento y expide las cédulas de ciudadanía, adoptando controles técnicos y de seguridad para asegurar la unicidad del documento.
La Registraduría coordina con otras entidades del Estado, atiende solicitudes de autoridades judiciales y de seguridad, y desarrolla procesos de innovación tecnológica para mejorar la identificación y la gestión de datos. En conjunto, estas funciones consolidan su papel dentro del Estado colombiano como responsable de la identificación de las personas y de la organización de los procesos que sustentan la democracia.
