Es muy poco probable que el adolescente de 14 años que accionó el arma contra Miguel Uribe en un parque del barrio Modelia en Bogotá, no contara con un dispositivo móvil. Esto ha sido corroborado en la inmensa cantidad de videos de cámaras de seguridad analizados por la Fiscalía, que evidencia que antes del atentado, el menor sí tenía un celular, pero al momento de ser capturado este ya no lo portaba consigo.
En video quedó registrado cuando en el momento de ser detenido, afirmó que entregaría los números de los que estaban vinculados con el atentado, se supone que esta información estaría en el dispositivo móvil.
General Carlos Triana, Director de la Policía Nacional
Los investigadores consideran que el móvil es una pieza clave en las investigaciones, contactos, mensajes, registros de ubicación serían informaciones determinantes para esclarecer los móviles del intento de asesinato del Senador.
Un celular puede indicar una trazabilidad digital que sobre quienes están involucrados con el crimen, chats, GPS sería información para determinar la logística del ataque.
Ante la desaparición del dispositivo se levantan varias hipótesis:
¿Después de los disparos alguien le recibió el celular al sicario?
¿Existe un posible encubrimiento que evitaría se conozca la información del móvil?
¿Existió una falla en los procedimientos en el momento de la captura?
¿Quién se lo llevo y por qué?
Lo cierto es que la Fiscalía y la Policía aseguran que están volcados en las investigaciones para encontrar este dispositivo, utilizando rastreo digital o por medio de informantes que revelen la ubicación debido a que se ofrece una millonaria recompensa que puede ascender hasta los $3.000 millones de pesos, para quien entregue información que conduzca a esclarecer los tristes hechos.
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