En una operación conjunta entre la Fiscalía General de la Nación y la Dirección de Carabineros de la Policía Nacional, se desmanteló un centro clandestino dedicado al sacrificio ilegal de pollos en el barrio La Nidia, Cúcuta, Norte de Santander.
Durante el operativo, se constató que el lugar operaba sin los permisos requeridos y en condiciones de insalubridad, sacrificando entre 800 y 900 aves diariamente. Las autoridades encontraron un total de 900 pollos vivos y 500 kilogramos de carne procesada, así como máquinas desplumadoras y otros equipos utilizados para llevar a cabo esta actividad ilegal.
Tres personas fueron capturadas: Sebastián Andrés Isaza Jiménez, Martín Francisco Campo Guerrero y Bernardo Antonio Isaza Tova, quienes enfrentan cargos por corrupción de alimentos, aunque no aceptaron la imputación.
Las pruebas recopiladas indican que las ganancias ilícitas del negocio superaban los 800 millones de pesos mensuales, lo que resalta la magnitud de esta operación clandestina. La intervención no solo busca frenar el maltrato animal, sino también garantizar la seguridad alimentaria y la salud pública en la región.
Este desmantelamiento es un paso importante en la lucha contra las prácticas ilegales en refleja el compromiso de las autoridades por proteger tanto a los animales como a los consumidores.
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