Las denuncias venían siendo secretos a voces en los barrios durante el tiempo del encierro por la pandemia. Jóvenes que departían en las canchas de los barrios del nororiente y noroccidente de la ciudad contaban que cuando salían, no era la Policía sino los Combos los que los abordaban y mandaban guardar. Durante ese tiempo parecían solo anécdotas que, inclusive, se justificaban por quienes indisciplinados violaban las restricciones; pero al terminar el encierro, las denuncias han sido mayores, pues son los combos, quienes se han apoderado de los escenarios deportivos de los barrios.
Ya no se trata solo de las canchas de las comunas del nororiente y noroccidente, las denuncias llegan de unidades deportivas como la de Belén. Los combos delincuenciales son quienes mandan, deciden quien entra y quien no, verifican si son o no del barrio, amenazan a quienes no están de acuerdo, destierran a quiénes no se someten a sus reglas, entre ellas, pagar por el uso de los escenarios.
Si un grupo de jóvenes con un balón, pretenden jugar un partido de fútbol, los combos cobran hasta 5mil pesos por persona por cada hora de uso de la cancha y 10 por el balón. El pago del balón se hace a la entrada y la de la gente a la salida, dependiendo del tiempo que hayan estado. Los acompañantes no pagan pero es justo entre ellos que viene la venta de droga.
Y es que los combos están utilizando los escenarios deportivos de la ciudad para la distribución de droga. Si quienes juegan compran marihuana, les bajan la tarifa y si compran bazuco o coca, les perdonan el cobro por el ingreso, son las denuncias que se acumulan por parte de los vecinos. Los combos no solo están cobrando a los que juegan en canchas. Como si fueran autoridad, están pidiendo identificación a quienes pasan cerca o se divierten en bicicleta o patines y advierten que la verificación es para establecer si es del barrio o de otro porque, dicen, están en guerra.
La última situación se vivió en la Unidad Deportiva de Belén, en donde ya las denuncias fueron acompañadas de grabaciones que soportan la denuncia y que evidencia lo que se venía advirtiendo desde el encierro: Los combos se apoderaron de los escenarios deportivos de la ciudad.
La presencia de éstos se produce a plena luz del día y a ojos, inclusive de la policía, quienes patrullan y se van, mientras los combos han desarrollado maniobras evasivas y caletas para esconder la droga sin que las autoridades puedan hacer algo. Los vecinos ven con preocupación que sus jóvenes y niños no puedan hacer deporte libremente, mientras que los adultos que utilizaban los espacios, están volviendo al encierro, esta vez, forzados por los impedimentos de los combos al uso libre de los espacios públicos en los barrios.
Algunos de los denunciantes le explican a IFMNOTICIAS que cuando se hace referencia a que se van a quejar con la Alcaldía, los miembros de estas organizaciones les responden entre risas que “bien pueda que no va a pasar nada, porque al alcalde lo elegimos nosotros”, dicen que desde los combos se habla de que fueron ellos quienes obligaron a la gente a votar en los barrios por el alcalde y que a cambio, les han permitido que puedan “administrar” las canchas y vender la droga sin que sean perseguidos fuertemente.
Es decir, las denuncias hablan de un pacto con el alcalde Daniel Quintero que los llevaría a ser amos y señores de las canchas y unidades deportivas. No obstante, este portan no ha podido confirmar la veracidad de ese pacto.
Lo que si es cierto es que las canchas y unidades deportivas están sitiadas por combos delincuenciales dedicados al microtráfico, que se están volviendo a trazar fronteras invisibles bajo amenazas y que desde varios combos se ha generado una guerra por el control del territorio.
