La Corte Constitucional emitió una nueva alerta sobre la situación carcelaria en el país, esta vez enfocada en una crisis sanitaria registrada en establecimientos de reclusión de Antioquia y Santander.
El alto tribunal advirtió sobre la presencia de brotes de tuberculosis en centros penitenciarios y de detención transitoria, y ordenó la adopción inmediata de medidas para atender a la población privada de la libertad en estas regiones.
La Sala Especial de Seguimiento, encargada de revisar las condiciones en las que se encuentran las personas privadas de la libertad, señaló que los reportes epidemiológicos reflejan un escenario crítico que requiere intervención urgente. El tribunal consideró especialmente preocupante que continúen los traslados entre establecimientos sin que se aseguren condiciones básicas de salubridad, pese a la confirmación de los brotes.
En sus órdenes, la Corte instruyó a las alcaldías de Medellín y Bucaramanga a coordinar con el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) y con la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC) la implementación de acciones inmediatas para controlar la situación. La directriz incluye reforzar la atención en salud, garantizar los procesos de prevención y evitar la propagación de enfermedades infectocontagiosas en estos espacios.
El tribunal también exigió la aplicación estricta de los lineamientos del Programa Nacional de Tuberculosis dentro de los establecimientos afectados. Esto implica la realización de tamizajes clínicos y bacteriológicos a quienes ingresen, el aislamiento respiratorio para casos sospechosos o confirmados, el suministro ininterrumpido de medicamentos y el seguimiento bajo la estrategia de tratamiento directamente observado.
En su sentencia, la Corte afirmó que las condiciones descritas evidencian problemas estructurales dentro del sistema penitenciario. Según los datos presentados, los centros de detención transitoria registran niveles de hacinamiento que alcanzan el 1.200%, mientras que los Establecimientos de Reclusión del Orden Nacional (ERON) presentan sobrepoblación del 228%.
Estas cifras fueron calificadas por el tribunal como indicativas de un escenario que supera cualquier margen manejable y que facilita la aparición y expansión de enfermedades como la tuberculosis.
La Sala Especial señaló que estas circunstancias no representan hechos aislados, sino situaciones que reflejan las dificultades históricas para garantizar condiciones mínimas de salud y dignidad dentro del sistema penitenciario.
Asimismo, hizo un llamado a las autoridades locales y nacionales para asegurar que las acciones ordenadas se implementen de forma inmediata, con el fin de mitigar los efectos del brote y prevenir nuevos casos en estas regiones.
Con esta decisión, la Corte reitera la necesidad de atender los factores que han venido agravando la situación carcelaria, mientras avanza el seguimiento a las medidas adoptadas por las entidades responsables en Antioquia y Santander.









