La justicia fijó para el 4 de agosto de 2025, a las 9:00 a. m., la audiencia de acusación contra el menor de edad señalado de disparar contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe.
El adolescente de 15 años fue capturado el mismo día del atentado, ocurrido el pasado 7 de junio, y actualmente permanece privado de la libertad mientras avanza el proceso penal en su contra.
El joven es investigado por los delitos de homicidio en grado de tentativa y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones. Según las autoridades, el adolescente habría aprovechado la concentración de personas que escuchaban al congresista durante un evento de campaña para acercarse y disparar en repetidas ocasiones. Fue aprehendido en flagrancia tras resultar herido durante el intento de fuga.
En paralelo al proceso penal contra el menor, la Fiscalía también ha recabado testimonios de otras personas involucradas en el atentado. Entre ellos, Cristian Camilo González Ardila, quien habría actuado como “campanero” el día del ataque. Según su declaración, recibió $10 millones por apoyar la operación, sin conocer inicialmente quién era el objetivo.
González explicó que el atentado fue planeado días antes a través de videollamadas con alias El Costeño o Chipi, identificado como Elder José Arteaga Hernández. Indicó además que el lugar del ataque, el parque El Golfito, fue seleccionado por los autores del plan, quienes compartieron la ubicación poco antes del atentado.
El relato entregado por González, conocido por el ente investigador, también señaló que el plan contemplaba una huida en motocicleta, pero esta no se logró concretar debido a la detención del menor minutos después de disparar contra el senador.
En cuanto a la salud de Miguel Uribe, el más reciente parte médico del hospital Fundación Santa Fe de Bogotá señala que permanece internado en la Unidad de Cuidados Intensivos.
Las lesiones por arma de fuego comprometieron zonas críticas, incluyendo su cabeza, y aunque ha mostrado evolución positiva, su pronóstico neurológico sigue siendo reservado.
