El presidente de la Cámara de Representantes, Julián López, envió una comunicación formal al encargado de negocios de Estados Unidos en Colombia, John McNamara, en la que manifestó preocupación por las declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump.
Recientemente, el mandatario estadounidense habría mencionado a Colombia dentro de los países que podrían ser objeto de ataques terrestres en el marco de acciones relacionadas con el narcotráfico.
La misiva plantea la necesidad de preservar los principios que han guiado la relación bilateral y evitar pronunciamientos que puedan generar interpretaciones que afecten la estabilidad diplomática.
En la carta, López indicó que las afirmaciones del mandatario estadounidense generan inquietud institucional en Colombia por hacer referencia a intervenciones militares. Señaló que este tipo de anuncios pueden tener implicaciones para la cooperación histórica entre ambos países, cuyo desarrollo ha estado sustentado en el diálogo y la corresponsabilidad frente a fenómenos como el narcotráfico y las economías ilícitas.
El documento advierte que cualquier insinuación de acciones unilaterales sobre territorio colombiano no se enmarca en los principios de soberanía establecidos por el derecho internacional.
El Presidente de la Cámara recordó que la cooperación entre Colombia y Estados Unidos se ha sostenido durante décadas en esquemas de trabajo conjunto y en el fortalecimiento de capacidades institucionales.
Subrayó que la lucha contra las drogas necesita esfuerzos coordinados por ser un desafío de alcance global que involucra corresponsabilidad de los Estados. Añadió que las Fuerzas Militares y la Policía Nacional de Colombia han tenido un papel relevante en estas tareas, así como en la atención de las consecuencias que estas actividades ilícitas generan en distintas regiones del país.
López también hizo referencia al impacto que, según la comunicación, sufren las comunidades más vulnerables y el personal uniformado, lo que refuerza la importancia de mantener mecanismos de cooperación que no generen señales equívocas. Indicó que preservar el respeto por la soberanía es fundamental para continuar avanzando en iniciativas bilaterales en materia de seguridad, desarrollo y otras agendas compartidas.
El Congresista invitó al gobierno estadounidense a evitar declaraciones que puedan afectar la confianza entre las partes y reiteró que, a su juicio, la relación entre ambos países debe mantenerse en escenarios de diálogo permanente.
Afirmó que la cooperación estratégica requiere de canales diplomáticos estables para atender los desafíos comunes y reiteró que cualquier planteamiento que involucre acciones militares debe excluir interpretaciones que interfieran con la soberanía colombiana.
La carta concluye con una solicitud para fortalecer la relación bilateral mediante mecanismos que promuevan el intercambio diplomático y técnico, con el propósito de enfrentar de manera conjunta los retos asociados a la seguridad, el combate al narcotráfico y otros temas que forman parte de la agenda compartida entre Colombia y Estados Unidos.











