La reciente incursión del exvicepresidente español Pablo Iglesias en la programación de Rtvc Sistema de Medios Públicos, con su programa «La Base», desató una ola de críticas, especialmente de la senadora María Fernanda Cabal.
La precandidata presidencial del Centro Democrático no tardó en manifestar su rechazo a la vinculación del político de izquierda al canal estatal, cuestionando los recursos públicos invertidos en esta propuesta.
Cabal se expresó en sus redes sociales mostrando su indignación ante lo que considera un uso indebido del dinero de los colombianos.
«¿Cuánto le pagarán a este comunista español? Queremos conocer el acuerdo o contrato firmado con este ideólogo de la extrema izquierda. Los medios públicos al servicio de ideologías fracasadas», escribió la Senadora, quien no ocultó su molestia ante lo que considera un intento de adoctrinamiento de los ciudadanos colombianos a través de una ideología que, según ella, ha fracasado en otras partes del mundo.
El programa «La Base», que se retransmitirá por la señal de Señal Colombia, contará con la participación de Iglesias, junto con Inna Afinogenova, exintegrante de la cadena pública rusa RT, y otros colaboradores como el experto en comunicación Manu Levin y la politóloga Irene Zugasti.
En sus intervenciones, Iglesias ha defendido la relevancia de su programa, asegurando que «con la televisión pública, muchos más ciudadanos colombianos podrán conocer nuestras ideas», mientras reflexionaba sobre la situación política internacional, criticando la postura de la derecha global.
Por su parte, el gerente de Rtvc, Hollman Morris, defendió la llegada de Iglesias a la plataforma estatal, resaltando la importancia de la pluralidad y el análisis profundo en los medios públicos.
«Pablo Iglesias, una de las voces más influyentes del pensamiento progresista en Iberoamérica, llega con La Base, un espacio para el debate internacional», expresó Morris, quien celebró la incorporación del político español, a pesar de las críticas que esto ha generado.
El fichaje de Iglesias, que coincide con un momento en que el Gobierno de Gustavo Petro impulsa diversas políticas progresistas, ha agitado el debate sobre el papel de los medios públicos en Colombia y su relación con las ideologías políticas. Mientras tanto, la controversia sobre el uso de los recursos del Estado para financiar espacios de opinión continúa siendo un tema candente en la política nacional.