Este lunes 15 de octubre, la vía Bogotá-Melgar amaneció bloqueada sorprendiendo a más de un viajero. A la altura del kilómetro 77, los habitantes y comerciantes de los corregimientos de Silvania y San Raimundo, en el municipio de Fusagasugá, decidieron bloquear ambos sentidos de la carretera, generando un colosal trancón que se extiende por más de 10 kilómetros.
La magnitud de la congestión ha afectado a miles de viajeros en esta importante vía que conecta la capital con el sur del país.
Los manifestantes reclaman agilidad en la construcción del tercer carril de la vía Bogotá-Girardot, una obra que consideran esencial para mejorar la conectividad y dinamizar la economía de la región.
Sin embargo, las demoras en la ejecución del proyecto han provocado serios perjuicios a los comercios locales, según aseguran los afectados. Además, exigen la edificación de un puente peatonal, senderos para garantizar la seguridad de los transeúntes, y la conservación de los retornos que facilitan la movilidad entre los municipios aledaños.
Concesión Vía Sumapaz responde
Ante el bloqueo que ha paralizado el tráfico durante varias horas, la concesión Vía Sumapaz, responsable del proyecto de ampliación y modernización de la vía Bogotá-Girardot, emitió un comunicado en el que asegura estar al tanto de las demandas de la comunidad y manifestó su disposición al diálogo.
«Entendemos las preocupaciones de las comunidades y reiteramos nuestro compromiso con un diálogo constructivo», señaló la concesión, agregando que junto a la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) se programó una visita técnica para evaluar las solicitudes de los manifestantes.
El proyecto de ampliación avanza según lo estipulado en el cronograma, con un 62% de progreso hasta la fecha. «Ya hemos puesto a disposición de los usuarios cuatro de los ocho tramos que componen el proyecto», afirmó la entidad, en un intento por calmar los ánimos de las comunidades afectadas.
Mientras los manifestantes se mantienen firmes en sus exigencias y los viajeros atrapados en el trancón han quedado varados durante horas sin poder avanzar, afectando no solo el tránsito de pasajeros, sino también el transporte de mercancías en esta ruta clave.
Hasta el momento, las autoridades no han logrado un acuerdo para levantar el bloqueo, y la situación en la vía Bogotá-Melgar sigue siendo crítica.
