En la plenaria del Senado de la República se dio inicio al cuarto y último debate de la reforma laboral. Durante la sesión, los congresistas aprobaron el 50% de los artículos propuestos, quedando pendientes 38 para su votación final antes del cierre de la actual legislatura, programado para el próximo 20 de junio.
El debate que comenzó este miércoles 11 de djunio con el rechazo a la ponencia alternativa presentada por la senadora Aída Avella, dando paso a la discusión del texto mayoritario, similar al aprobado previamente en la Comisión Cuarta del Senado. Juan Felipe Lemus, senador del Partido de la U y coordinador ponente, indicó que la propuesta busca reivindicar los derechos laborales.
Durante la jornada inicial de votación, los senadores aprobaron un primer bloque de 17 artículos tal como fueron presentados en la ponencia. Entre ellos se encuentran los artículos 8, 22, 24, 26, 27, 28, 30, 31, 43, 44, 52, 58, 59, 67, 69, 72 y 73. El artículo 24 establece que los estudiantes de medicina que realicen el internado obligatorio recibirán una remuneración mensual no inferior al salario mínimo.
Posteriormente, se aprobó un nuevo bloque de 22 artículos, con 83 votos a favor y 4 en contra. En este bloque quedaron incluidos los artículos 1, 3, 4, 10, 18, 20, 32, 33, 34, 35, 41, 42, 46, 50, 51, 53, 55, 56, 57, 65, 70 y 71. El artículo 54 fue retirado de la discusión.
En la sesión también se discutieron y aprobaron de forma individual varios artículos. El artículo 6, relacionado con los contratos a término fijo, fue aprobado con 74 votos a favor y 10 en contra, estableciendo un periodo máximo de cuatro años para este tipo de contratación. Por su parte, el artículo 2 fue aprobado con 50 votos a favor y 31 en contra, mientras que el artículo 5 fue aprobado tal como venía, sin votación nominal.
Durante el debate, el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, presentó 13 proposiciones que, según indicó, serían clave en la discusión. Entre ellas, la eliminación del trabajo parcial o por horas, y la formalización de madres comunitarias, trabajadoras de jardines infantiles, manipuladoras de alimentos en colegios y trabajadores del transporte de carga.
También se abordaron temas relacionados con el contrato de aprendizaje. La propuesta establece que, durante la fase lectiva, la remuneración del aprendiz se elevaría del 50 al 75 por ciento del salario mínimo, mientras que en la etapa práctica sería del 75 al 100 por ciento. Además, se contempla el acceso a servicios de salud durante la etapa lectiva y el reconocimiento de la experiencia laboral adquirida.
Entre los puntos más discutidos se encuentra la modificación de los recargos nocturnos, que iniciarían a las 7:00 p.m., y el incremento del recargo por trabajo en domingos y festivos del 75% al 100%. Según plantearon representantes de gremios empresariales, estas medidas podrían significar un incremento de entre el 18% y el 35% en los costos laborales.
La reforma también establece que el contrato a término indefinido será la regla general, limitando los contratos a término fijo a un periodo máximo de cinco años. Asimismo, propone una prima adicional para empresas que registren un crecimiento superior al 4%.
Respecto al texto aprobado en la Cámara de Representantes, se eliminaron artículos como el del contrato sindical y el que ampliaba la licencia de paternidad de dos a cuatro semanas. La senadora Esmeralda Hernández, del Pacto Histórico, expresó que esta eliminación podría generar una mayor carga de tareas de cuidado para las mujeres.
En paralelo al avance del debate legislativo, el presidente Gustavo Petro firmó el decreto para convocar a una consulta popular en la que se incluirán temas laborales y de salud. La decisión ha generado críticas entre gremios y sectores económicos, que advierten sobre posibles afectaciones al orden constitucional. María Claudia Lacouture, presidenta de AmCham, señaló que si el Congreso aprueba la reforma laboral, la consulta perdería su objeto.