Cada 26 de junio se conmemora el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas, fecha en la que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) presenta su informe anual sobre la situación global de las drogas.
El Informe Mundial sobre las Drogas 2025, elaborado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), incluye datos consolidados de 2023 y 2024. Según el informe, 316 millones de personas consumieron algún tipo de droga durante ese período, lo que representa aproximadamente el 6% de la población mundial. En comparación con la última década, esta cifra refleja un aumento del 28% en el consumo global.
La marihuana sigue siendo la sustancia más consumida, con 244 millones de usuarios, seguida por los opioides (61 millones), la cocaína (31 millones), el éxtasis (25 millones) y las anfetaminas (21 millones).
Uno de los hallazgos más preocupantes del informe es el récord histórico en la producción de cocaína, que alcanzó 3.708 toneladas en 2023, lo que representa un aumento del 34% respecto a 2022 y casi cuatro veces más que en 2014. Las incautaciones globales también alcanzaron un máximo histórico: 2.275 toneladas, lo que supone un incremento del 68% en comparación con el promedio entre 2019 y 2023.
“La producción, incautaciones y consumo de cocaína alcanzaron nuevos máximos en 2023, convirtiéndose en la droga ilícita con mayor crecimiento de mercado”, destaca el informe.
La expansión del cultivo de hoja de coca, especialmente en Colombia, junto con la mejora tecnológica en los laboratorios ilegales, es señalada como una de las principales razones de este incremento. Aunque el informe no menciona países específicos, es evidente el impacto de esta dinámica en regiones como el suroccidente colombiano.
El informe también advierte sobre el vínculo directo entre el narcotráfico y el crimen organizado. Estas economías ilegales no solo alimentan redes criminales, sino que desafían al Estado mediante el uso de la violencia, la corrupción y el control territorial. Las organizaciones armadas imponen normas propias, ejercen dominio sobre comunidades y emplean la violencia de forma sistemática para proteger sus operaciones y mantener su reputación.
Otro aspecto crítico del informe es el impacto social y sanitario del consumo de drogas. Se estima que, en 2021, casi medio millón de personas murieron por causas relacionadas con el consumo, y se perdieron 28 millones de años de vida saludable (AVAD) por discapacidad o muerte prematura. A pesar de estas cifras, solo una de cada 12 personas con trastornos por consumo recibió tratamiento en 2023.
“Los trastornos por consumo de drogas representan un costo enorme para las personas, las comunidades y los sistemas de salud. El creciente alejamiento del multilateralismo y la reasignación de recursos podrían intensificar el problema”, señala el informe.
Finalmente, el informe concluye que la inestabilidad global, sumada a conflictos armados y crisis humanitarias, agrava los desafíos para enfrentar el problema mundial de las drogas, empoderando a grupos criminales y elevando el consumo a niveles históricamente altos.
Conéctese con IFMNOTICIAS! Síganos en nuestros canales digitales y active las notificaciones. @ifmnoticias en Instagram, X, Facebook, YouTube y Dailymotion!
