El periodista, escritor y exalcalde de Medellín, Alonso Salazar, compartió sus reflexiones sobre el periodismo, la cultura y la situación del país durante su participación en el Hay Festival Jericó 2024. En una entrevista exclusiva con IFMNOTICIAS, Salazar abordó temas clave de su carrera y sus próximos proyectos, además de revelar detalles de su más reciente obra, una crónica que lanzó en el 2014 con la Editorial Debate.
Salazar se mostró crítico con la dirección del periodismo actual, resaltando la prevalencia del sensacionalismo en los medios. “Los medios se han concentrado demasiado en lo amarillo, en lo fácil de digerir, y eso me preocupa”, afirmó. También hizo un llamado a un consciente y reflexivo que no se quede atrapado en lo negativo. Además, recalcó que el desafío de competir con los medios actuales, que tienen una inmediatez y eficacia sorprendentes, es uno de los mayores retos que enfrentan los periodistas hoy en día.
Al preguntarle sobre su próximo proyecto literario, Salazar compartió que no tenía claridad sobre su futuro inmediato, pero señaló que sigue explorando el periodismo y las biografías como una forma de contar la historia del país. Mencionó que el riesgo de seguir abordando temas como la guerra, los desplazados o los desaparecidos le resulta preocupante, pues siente que ya se ha repetido tanto este tipo de narrativa en su obra como en la de otros escritores.
Una de las partes más profundas de su conversación fue sobre su último lanzamiento El largo vuelo del cirirí, un libro que, según Salazar, nació de la necesidad de contar la historia de Fabiola Lalinde. “Mi propósito era contar la historia de Fabiola, pero como se tejió alrededor de la búsqueda de su hijo, quise contextualizar esa época a través de este joven revolucionario, desaparecido en la coyuntura del proceso de paz del gobierno de Belisario Betancur”, explicó el escritor. Además, subrayó que uno de los temas centrales del libro es la desaparición forzada en Colombia, resaltando que “nadie debe ser desaparecido en un Estado de derecho”.
Salazar también destacó el valor humano y la dedicación con la que escribió la historia de Fabiola. “Lo escribí con mucho amor, porque Fabiola estaba buscando lo que consideró necesario: los derechos humanos”, afirmó, expresando su admiración por la madre que, a pesar del dolor y la pérdida, no dejó de buscar justicia para su hijo.
Sobre la relación entre la política y la cultura, Salazar consideró que la cultura siempre se ha visto como algo subsidiario, un área a la que se le da menos importancia en los presupuestos públicos. Sin embargo, recordó que, en los años 90, fue precisamente la cultura lo que contribuyó a la transformación de Medellín, particularmente a través de grupos como el colectivo Matacandelas. “La cultura tiene el poder de cambiar realidades, aunque a veces no se le da el lugar que merece”, destacó.
Al hablar sobre la participación ciudadana, Salazar reflexionó sobre cómo invitar a las nuevas generaciones a participar activamente en la vida pública. Alonso Salazar coincidió con la directora de IFMNOTICIAS dejando claro que en definitiva tal y como ella mencionó, “la democracia no solo está en las urnas, sino también en las conversaciones que tenemos en las calles, en las tertulias”. Este tipo de espacios de discusión abierta son, para él, una forma fundamental de involucrar a los ciudadanos y hacerlos partícipes de la construcción de una sociedad más equitativa.
Finalmente, Salazar se refirió a los desafíos de escribir en un país donde, aunque la violencia y las injusticias siguen presentes, las formas de crimen se han transformado. A pesar de las disminuciones en las cifras de homicidios, el escritor advirtió que la criminalidad en Colombia se ha vuelto más compleja y está cada vez más entrelazada con lo social y lo institucional. “Es muy difícil dar una opinión certera sobre lo que ocurre en Medellín hoy en día”, señaló, reconociendo que la ciudad ha cambiado y, con ella, su comprensión de los eventos actuales.
En resumen, la conversación con Alonso Salazar en el Hay Festival Jericó 2024 fue una reflexión profunda sobre el periodismo, los desaparecidos, la cultura y la democracia, invitando a los asistentes a pensar en las maneras en que estos temas pueden seguir impactando a la sociedad colombiana en el futuro.
Alonso Salazar está convencido de querer seguir escribiendo sobre lo que le gusta y de dejar su granito de arena en el país para la transformación de la sociedad que tanto se anhela hoy en día.
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