Durante la primera Cumbre de Seguridad del Magdalena Medio, celebrada en Barrancabermeja, trece alcaldes de municipios de esta región solicitaron al Gobierno nacional la extensión del proceso de paz urbana que se iniciará en ese Distrito, con el fin de incluir a sus territorios en la iniciativa de diálogo con estructuras criminales.
El encuentro, liderado por la Alcaldía de Barrancabermeja, convocó a mandatarios locales de Santander, Antioquia, Bolívar y Boyacá, así como a autoridades de la Fuerza Pública y representantes del nivel central.
Según los asistentes, los municipios comparten condiciones similares de orden público y presencia de grupos armados, lo que motiva la solicitud conjunta de inclusión en los eventuales mecanismos de diálogo.
El secretario del Interior de Barrancabermeja, Harold Villabona Isidro, explicó que el Distrito ha venido promoviendo su territorio como escenario para un proceso de paz urbano con organizaciones ilegales presentes en la zona. Durante su intervención señaló que la estrategia está orientada a entablar conversaciones con aquellos actores que manifiesten voluntad de diálogo y avances verificables en su comportamiento.
La cumbre tuvo como eje principal la elaboración de una hoja de ruta regional en materia de seguridad. Entre las prioridades identificadas se incluyeron:
- Fortalecer la lucha contra la minería ilegal en los municipios del Magdalena Medio.
- Reforzar el control territorial en comunas priorizadas de Barrancabermeja, donde se ha identificado la articulación de estructuras criminales.
- Establecer una coordinación directa con la Fiscalía General para priorizar investigaciones sobre extorsión.
- Potenciar la capacidad operativa de la Policía Judicial en zonas estratégicas como el sur de Bolívar.
- Articular operaciones conjuntas para identificar, capturar y judicializar a los responsables de delitos de alto impacto.
Además de los compromisos operativos, los alcaldes acordaron trabajar en la consolidación de una agenda regional de seguridad y paz. El objetivo es construir una propuesta que no solo contemple acciones de control, sino que promueva una presencia integral del Estado en materia social, institucional y de infraestructura.
Durante la jornada se advirtió que un enfoque territorializado del proceso de paz urbana podría reducir los riesgos de desplazamiento de la criminalidad hacia municipios aledaños. Los asistentes también señalaron que cualquier estrategia focalizada en un solo municipio podría generar efectos secundarios en zonas vecinas si no se incluye una política regional.
El evento finalizó con la instalación de una mesa técnica para elaborar un documento conjunto de propuestas que será enviado a la Oficina del Alto Comisionado para la Paz y al Ministerio del Interior.