La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) confirmó la suspensión y reducción de varios de sus programas de asistencia en Colombia, debido a la falta de recursos financieros. Así lo informó este viernes su portavoz, William Spindler, en rueda de prensa desde Ginebra.
Spindler explicó que la organización necesita 118,3 millones de dólares para mantener sus operaciones en Colombia durante el 2025. Indicó que los recortes presupuestarios de su principal donante en América, Estados Unidos, han afectado la capacidad de respuesta de Acnur en el país.
Según el portavoz, la interrupción de los programas afecta directamente a poblaciones desplazadas y refugiadas, entre ellas niños, mujeres y familias que dependían de la asistencia humanitaria. Señaló que se ha tenido que suspender la distribución de insumos básicos como sábanas, productos higiénicos y linternas en zonas afectadas como el Catatumbo, donde el conflicto armado ha desplazado a unas 63.000 personas.
Acnur también detuvo dos programas de apoyo para más de 17.000 niños que había iniciado en 2024, situación que, según la agencia, los expone a mayores riesgos de reclutamiento forzado, explotación y abusos.
La falta de fondos amenaza igualmente la continuidad de programas clave como la regularización de aproximadamente 500.000 venezolanos en Colombia y el apoyo a los esfuerzos del Gobierno para legalizar asentamientos informales de más de 100.000 desplazados internos.
Spindler destacó que los recortes impactan las labores de estabilización, integración local y fortalecimiento de la autonomía de refugiados y desplazados. Recordó que Colombia alberga cerca de siete millones de desplazados internos, más de tres millones de migrantes y refugiados venezolanos, y medio millón de retornados colombianos.
En su intervención, el portavoz de Acnur añadió que hasta la fecha solo se ha recibido un 4,6% de los 1.400 millones de dólares que la ONU había proyectado como necesarios para asistir a refugiados y migrantes venezolanos en Latinoamérica en 2025.
Aunque Estados Unidos ha sido históricamente el mayor donante para los programas de Acnur en la región, Spindler mencionó que otros países como Japón, Suecia, Corea del Sur y España han realizado aportes significativos. La agencia indicó que mantiene conversaciones tanto con estos donantes como con autoridades estadounidenses para asegurar el financiamiento necesario en el futuro.