Con profundo sentimiento y solemnidad, desde hace 403 años se recuerda y celebra en los Estados Unidos de Norteamérica un suceso que reúne e ilustra, como ninguno otro, las virtudes humanas, el deber ser de todo ser humano, unos hábitos positivos adquiridos y vividos en familia que se hicieron extensivos a la sociedad.
Esta celebración es conocida como el THANKSGIVING (dar las gracias). Aunque la conmemoración del THANKSGIVING está oficialmente establecida para el 4º jueves del mes de noviembre, dar las gracias debe ser un gesto que hagamos a diario todos los seres humanos para no olvidarnos de lo agradecidos que debemos estar por todo aquello de lo que disponemos, tanto inmaterial como material.
El origen del THANKSGIVING se remonta a mediados del mes de noviembre de 1620, cuando a bordo de una embarcación denominada “Mayflower”, llegaron a la costa ubicada en el noroeste de la en ese entonces inhóspita Norteamérica, 102 pilgrims (peregrinos) ingleses quienes venían huyendo de una persecución religiosa en Europa. Este reducido número de peregrinos lograron sobrevivir y establecerse en esas desconocidas tierras con condiciones climáticas severas, gracias a que los nativos de la tribu Wampanoag les asistieron y ayudaron de manera desinteresada.
Un año después, el 4º jueves del mes de noviembre de 1621, en un gesto de agradecimiento para con los nativos que tan cálidamente les habían acogido, los peregrinos prepararon e invitaron a los miembros de la tribu Wampanoag a una cena en la que se degustaría el fruto de sus cosechas y trabajo. Quienes hasta un año antes eran perfectos desconocidos, dieron ejemplo y de paso sentaron presente histórico, con respecto a la esencia humilde, paciente, justa, prudente, fuerte, generosa, de templanza, optimista y leal del ser humano.
Considerando que desde temprana edad he estado plenamente consciente de lo bendecido que he sido a nivel personal, familiar y profesional, ha sido mi compromiso de vida probarme merecedor de tanta gracia pensando, hablando y obrando siempre de manera correcta, honesta, respetuosa y solidaria. En este exigente y maravilloso trasegar, pleno de adversidades, amenazas, tropiezos, derrotas y desengaños para con el logro de mis sueños, resulté planteando e implementando la que he denominado LA FÓRMULA PARA ALCANZAR LOS SUEÑOS, fórmula que se escribe C2Q.
Como acción de gratitud diaria, esta fórmula parte de honrar en todo momento de mi vida, desde la concepción misma del sueño hasta el último día de trabajo para alcanzarlo, las nueve (9) virtudes que debe poseer todo ser humano. Este enunciado está compuesto por los verbos Creer, Crear y Querer.
Lo primero es CREER. Resulta fundamental ¡CREER QUE LO QUE SOÑAMOS ES POSIBLE! y que será más posible aun porque nosotros así lo creemos, punto. No será fácil alcanzar los sueños, entre otras razones, porque habrá infinidad de escépticos y de negados que dirán que no será posible lograrlo, que nadie ha sido capaz, que eso con lo que se sueña no es posible… Y es aquí cuando CREER, además de impulsar, servirá para proteger el sueño, resultará útil para blindarlo de esas influencias negativas de los ineptos, de esos comentarios destructivos de los incapaces, de esos ataques dañinos de los castrados y mal llamados “realistas”… Cuando se cree en un sueño se aplica la recomendación de Antoine de Saint-Exupéry y se resulta haciendo ”… de la vida un sueño y de ese sueño tu realidad.” Este acto de fe en uno mismo y en todo aquello bueno que se anhela, agradece, honra y aplica las virtudes de la humildad, de la prudencia, y del optimismo.
El segundo elemento que integra esta fórmula que sugiero se considere aplicar para sacar adelante los sueños es CREAR. ¡Hay que CREAR lo que sea necesario para sacar adelante los sueños, hay que ¡CREAR PARA QUE LO QUE SOÑAMOS SEA POSIBLE! Y este CREAR depende fundamentalmente de crearnos como personas de bien día a día, con el paso de cada hora, de cada minuto, segundo a segundo…
Es indispensable CREAR lo que sea necesario para mantener con vida el sueño y para seguirse construyendo como persona. Este compromiso con hacer lo necesario, con concebir dentro de la legalidad y de las buenas maneras, lo que se requiera para alcanzar un sueño, agradece, honra y ejercita las virtudes de la justicia, de la fortaleza, y de la generosidad.
Y el tercer verbo de esta fórmula, la tercera actitud que integra esta teoría es QUERER. Además de CREER y de CREAR, es determinante para lograr cumplir los sueños ¡QUERER QUE LO QUE SOÑAMOS SEA POSIBLE! Y no se puede simplemente desear que los sueños se hagan realidad, pues no bastará… Se debe QUERER sacar adelante los sueños con toda la fuerza, con toda la determinación posible y necesaria para lograrlo, ¡haciendo y dejando de hacer lo que se requiera para conseguirlo! Solo cuando la necesidad de QUERER alcanzar los sueños sea igual a la mucho que se quiere respirar, se tendrá éxito.
QUERER es un asunto de corazón, porque ser inteligente y ser capaz no es suficiente: Se debe tener corazón, ¡se debe meter corazón! ¡Por QUERER alcanzar nuestros sueños debemos estar dispuestos a sacrificar quienes somos, para así poder convertirnos en quienes queremos ser! El dolor, el cansancio y hasta el hambre son temporales, y aunque pueden durar minutos, horas, días, e incluso hasta meses, igual pasarán… Pero si se desiste, si se renuncia, el dolor, el cansancio y hasta el hambre durarán por siempre. Cuanto más sanamente ambicioso, bien intencionado y generador de bienestar colectivo sea un sueño, más nos ayudará a cultivar, honrar y aplicar las virtudes de la paciencia, de la templanza, y de la lealtad.
Agradecer aquello de lo que disponemos es fundamental, pero de nada sirve si no le damos buen uso. Con motivo de la celebración del THANKSGIVING Norteamericano, quiero manifestar mi gratitud al Señor Presidente electo Donald Trump por el monumental ejemplo que de paciencia, de templanza, de lealtad, de fortaleza, de justicia, de generosidad, de humildad, de prudencia y de optimismo nos ha dado a los ciudadanos de bien cuando de alcanzar los sueños se trata.
No obstante y que durante los últimos diez años le inventaron tramas, le montaron campañas de desprestigio, le hicieron trampa en unas elecciones, le tramitaron dos (2) impeachments (procesos por supuesta mala conducta), trataron de sacarlo del tarjetón electoral, desde el ejecutivo se inventaron procesos judiciales en su contra, el 95% del cubrimiento que le hicieran los medios de comunicación convencionales fueron para desprestigiarle, se gastaron 5 billones de dólares en publicidad atacándole, y se le ha intentado asesinar dos (2) veces, no renunció a su sueño…
Durante la última década la izquierda globalista en el poder de la potencia del mundo, intentó destruirle, llevarlo a la bancarrota, y encarcelarle, y él, además de no dejarse, utilizando la LEY, con la VERDAD, y con la JUSTICIA como sus únicas armas, prevaleció pues la gente le creyó. Agradezco tan inspiradores ejemplos.
