Las alertas del Gobierno se dispararon ayer cuando, lo que se creía seguro, que la reforma pensional contaba con las mayorías en la Plenaria de la Cámara, el ministro Luis Fernando Velasco, veía como el quórum se le iba disolviendo en el elíptico del Capitolio.
En la sesión del día martes estaba programado votar los impedimentos, pero debido a lo ocurrido, no se realizó nada.
Esta situación es una alerta, dado que al parecer el Gobierno no cuenta con las mayorías para aprobar el proyecto, y el panorama es que le quedan muy pocos días para evitar que se hunda en su cuarto debate.
La mayoría de los representantes salieron del recinto por las recusaciones relacionadas con los hechos de las denuncias de Sneyder Pinilla, sobre el presunto pago de sobornos a congresistas para facilitar la aprobación de las reformas.
La Comisión de Ética de la Cámara, no termina de resolver todas las recusaciones, ya se han tramitado 60, pero los congresistas prefieren no votar antes de tener un resultado de las mismas y así no estar expuestos a una investigación de la Corte Suprema de Justicia.
Además, hay que resolver los impedimentos sobre otros temas, que fueron contra representantes de los partidos, Conservador, Liberal y de La U.
Para este miércoles, se escucharán los argumentos de los que presentaron las recusaciones, ya se han presentado pruebas y la Comisión de Ética tiene hasta el 14 de junio para resolver todas las iniciativas, estas afectan también a miembros del Pacto Histórico, es por esto que la Comisión ha ahondado en las investigaciones, solicitando conceptos y teniendo en cuenta los argumentos de los demandantes.
Ante la presión de parte de los miembros del Gobierno y la bancada de Pacto Histórico para agilizar las decisiones, la presidenta de la Comisión de Ética, Juana Carolina Londoño, fue contundente al afirmar, «Los tiempos del Gobierno son los del Gobierno y los del Congreso son otros».
Todos los trámites en la Comisión de Ética requieren tiempo y esto es de lo que no dispone el Gobierno, porque su proyecto de la reforma pensional se queda sin aire cada minuto.