La compañía STIHL, con su sede ubicada en el municipio de Rionegro, puso en funcionamiento el sistema fotovoltaico de 140 paneles solares junto con la planta de tratamiento de aguas lluvias, una apuesta encaminada a la reducción de su huella de carbono y el cuidado del medio ambiente.
Las dos iniciativas tienen el claro propósito de convertir a STIHL en una empresa sustentable, mediante el aprovechamiento de los recursos naturales. En el caso del sistema de energía solar fotovoltaica, STIHL busca la autosuficiencia energética, disminuyendo la demanda de energía a la red interconectada, lo que se traduce en lograr ahorros en el consumo.
La compañía genera 65 328 Kwh/año, además reduce su huella de carbono durante la vida útil del proyecto, que es de 10 años.
La puesta en marcha de esta planta de tratamiento, le permite a STIHL contribuir con el medio ambiente, mediante la reutilización de las aguas lluvias que antes se perdían en el sistema de alcantarillado.
Con esta acción se benefician todos los empleados y visitantes de las oficinas de la empresa, incluido el personal de distribuidores que a diario acuden a talleres y sesiones de capacitación. Además, también gana la comunidad, porque al disminuir el consumo de agua no se demanda el servicio del acueducto local, sino que a cambio se genera la propia agua, aprovechando las lluvias.
