La campaña del Gustavo Petro, desde hace mucho tiempo, ha venido difundiendo la idea de que si no gana las elecciones presidenciales, es porque hubo fraude electoral.
En recientes pronunciamientos, Gustavo Petro se ha referido al proceso del próximo domingo, afirmando que si el resultado es transparente, lo aceptará, pero si no lo es, acudirá a los organismos nacionales e internacionales para hacer respetar la votación popular. La pregunta es: ¿cómo llega a la conclusión de si es transparente o no?
Lo cuestionable es que Gustavo Petro lleva meses anunciando la posibilidad del fraude electoral, abonando el terreno para que sus afirmaciones sean vistas como una premonición que se ha cumplido en contra suya, si es perdedor. Lógicamente si es declarado ganador, el ejercicio fue una muestra de democracia y transparencia. Es como dice la sabiduría popular, «con cara gano yo, con sello pierdes tú».
Al respecto, el registrador Alexander Vega dijo:
Lo que si es cierto es que existe la amenaza de que si Petro no es ganador, no reconozca los resultados. Además, anuncios como los de Sofía Petro de que si su papá no es presidente, se puede llegar a un estallido social peor que el vivido el año pasado, nos puede llevar a una grave situación de violencia en las calles de nuestro país.
En entrevista con El Universal de Cartagena, el presidente Iván Duque afirmó:
Cortesía El Universal de Cartagena
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Petro ha intentado calmar los rumores y ha salido a decir que los ciudadanos pueden estar tranquilos, «que nuestra fuerza que son millones de personas en todo el país, no hará ningún ejercicio que ponga en peligro esa tranquilidad».
Para algunos, las palabras del candidato generan más preocupación que tranquilidad, al utilizar términos como «nuestra fuerza, millones y ejercicio» se puede tomar como un acto intimidatorio y amenazante contra los colombianos.
La mayoría de los colombianos solo aspiran a tener unas elecciones en paz y que el candidato que sea derrotado asuma su responsabilidad con nuestro país.
