Por Carlos Cascante
Proyecto del partido de gobierno electo:
Después del desarrollo de múltiples reuniones y plenos con toda nuestra militancia y nuestras diferentes comunidades concentramos todos nuestros objetivos en la imperiosa necesidad de replantear la doctrina del enemigo interno.
Con nuestra llegada al poder debemos concentrar nuestro esfuerzo en el rediseño de la fuerza pública.
Como prioridad la salida de la policía nacional del Ministerio de Defensa para pasarla al Ministerio del Interior, donde sería desmilitarizada y enfocada en la protección de nuestro partido de gobierno, de las minorías y de las comunidades. Harán parte de nuestra policía nacional nuestra guardia indígena ancestral para que protejan sus territorios, al igual que las comunidades afrocolombianas.
Debemos empezar un proceso de cambio dentro de la fuerza militar. Llamar al retiro a todo el generalato actual y colocar un comité civil que oriente y direccione todas las recomendaciones de este comité.
Algunos generales ya han tomado contacto con el Dr. Gustavo y con ellos empezaríamos ese proceso.
Con el listado de oficiales que tenemos en las diferentes organizaciones sociales deben ser retirados para poder establecer nuestros comisarios que serán los líderes civiles de la fuerza militar. Todos sobre los que exista duda deben ser retirados.
Cambiar el sistema de educación desapareciendo el concepto de enemigo interno e incluir conceptos como territorios, soberanía indígena, derechos de las negritudes, garantías para los movimientos sociales y rurales. Para ello la fuerza pública debe salir de los territorios donde las comunidades puedan garantizar sus propias autonomías de los pueblos originarios.
Mientras empezamos el desarrollo de la gran mesa de reconciliación nacional que tenemos planteada donde harán parte todos los actores armados. Mientras se desarrolla esa tregua democrática podremos tener la oportunidad de hacer todos los ajustes necesarios en la fuerza pública como su concentración y organización.
Debemos definir su presupuesto bajo la premisa de que sea manejado por un comité que regule y controle todos los gastos de ese ministerio.
Con la disminución de la violencia con la gran tregua nacional que plantea Gustavo no requeriremos de tanto pie de fuerza, así sería más fácil disminuir su gasto público.
Las tablas y cargas laborales del ministerio de defensa deben ser cambiadas y establecer una sola coordinación que elimine los viceministerios. No necesitamos comprar material bélico ya que vamos a restablecer todas las relaciones con nuestros países hermanos. No vamos a seguir de peones del imperio.
Ninguna compra será autorizada sin visto bueno del comité.
La democratización y llegada de las comunidades a la fuerza militar como lo planteamos desde el acuerdo de paz podremos usar estas unidades militares y bienes del ministerio para potenciar proyectos de vivienda y agrícolas para las comunidades. El servicio militar debe desaparecer para implementar un servicio social a las comunidades, nadie debe ser obligado a usar las armas contra sus mismos compatriotas. Las escuelas de la fuerza pública abrirán sus puertas a la carrera militar a todos aquellos que quieran servir.
Estableceremos unos comités de naturaleza civil donde revisemos las promociones, premios y ascensos de los militares. Todos aquellos que sean violadores de derechos humanos, de derechos de las mujeres y de las minorías deben ser castigados y encarcelados.
Con todos los militares presos y aquellos que aportan a la JEP deben pagar sus penas sirviendo a las comunidades agrícolas con su trabajo, deberán pedir perdón y se levantarán placas para la memoria histórica de los pueblos.
La justicia penal militar debe ser derogada. Proponemos una justicia administrada por las comunidades.
Debemos implementar el acuerdo de manera total y buscar acuerdos programáticos y la solución de todas las diferencias.
La lucha contra las drogas terminó, se legalizarán y pagaran impuestos al Estado, el problema de consumo es de las potencias, no nuestro. Buscaremos economías agrícolas.
Reforzaremos nuestra amistad con nuestros hermanos, Cuba, Venezuela, Argentina con quienes podremos establecer muy buenos proyectos y con todos aquellos que quieran aportar a esta gesta latinoamericana.
En atención a comentarios de miembros de este comité, donde vemos posibilidades de retaliaciones por parte de la fuerza pública se hace prioritario el llamado al retiro de oficiales y mandos de tropa que sigan en favor de la lucha contrainsurgente instruida por la Escuela de las Américas durante muchas décadas. Para poder realizar este tema preguntaremos a los jurídicos como podemos tomar medidas macro para neutralizar cualquier intención de magnicidio o golpe de Estado.
