El jefe del regulador de salud de Brasil, Anvisa, le pidió al presidente Jair Bolsonaro, escéptico de las vacunas, que se retracte de las declaraciones que hizo criticando a la agencia por autorizar la vacunación de niños contra el COVID-19.
En una carta a Bolsonaro hecha pública el sábado por la noche, el contralmirante retirado Antonio Barra Torres le pidió al presidente que respaldara su afirmación de que había “intereses” no revelados detrás de la decisión de la vacuna o que se retractara de sus palabras.
Bolsonaro criticó el jueves a Anvisa por aprobar el uso para niños de 5 a 11 años de la vacuna pediátrica fabricada por Pfizer Inc, diciendo que no había oído hablar de niños que murieran de COVID-19.
“¿Qué hay detrás de esto? ¿Cuáles son los intereses de los maníacos de las vacunas?” Bolsonaro declaró en una entrevista radial.
Bolsonaro, un líder de extrema derecha que se ha jactado de no haber sido vacunado él mismo y siempre ha puesto en duda la eficacia y seguridad de las vacunas contra el coronavirus, dijo que las inyecciones podrían tener efectos secundarios en los niños, pero no proporcionó evidencia.
Anvisa y los reguladores de salud de todo el mundo han descubierto que las vacunas COVID-19 son seguras para personas de 5 años en adelante. Según el consejo de secretarios estatales de salud, al menos 300 niños de 5 a 11 años han muerto en Brasil por COVID-19.
La oficina del presidente no respondió a una solicitud de comentarios sobre la carta, que llegó pocos días después de otra divergencia entre Bolsonaro y el ejército.
El Ejército de Brasil difirió del presidente la semana pasada sobre cómo lidiar con el COVID-19. Ordenó a los soldados que se vacunaran, usaran máscaras y mantuvieran la distancia social, y les advirtió que no difundieran noticias falsas sobre la pandemia.
