La representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, se reunió virtualmente el lunes con altos ejecutivos de las farmacéuticas Pfizer (PFE.N) y AstraZeneca PLC (AZN.L) para discutir una propuesta de exención de ciertos derechos de propiedad intelectual en respuesta a la pandemia de COVID-19.
Los miembros de la Organización Mundial del Comercio deben discutir una propuesta de India y Sudáfrica para renunciar a ciertas disposiciones del Acuerdo de la OMC sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (ADPIC) el 30 de abril, pero Estados Unidos y algunos otros grandes los países han bloqueado tal movimiento.
Legisladores demócratas, grupos de la sociedad civil y 60 exjefes de estado y 100 premios Nobel han instado al presidente Joe Biden a respaldar la exención. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo el lunes que no tenía actualizaciones sobre el tema.
Las reuniones de Tai con los ejecutivos de Pfizer y AstraZeneca reflejan su intenso compromiso con el tema y siguen reuniones similares con grupos de defensa, ejecutivos de la industria y otros.
A principios de este mes, Tai dijo en una reunión de la OMC que la enorme brecha entre el acceso a los medicamentos de los países desarrollados y en desarrollo era “completamente inaceptable” y que la industria necesitaba hacer sacrificios en tiempos de crisis.
En su conversación con el director ejecutivo de Pfizer, el Dr. Albert Bourla, Tai enfatizó su compromiso de trabajar con otros miembros de la OMC en una respuesta global a la crisis, dijo su oficina en un comunicado.
Eso incluyó “el papel de los países en desarrollo en cualquier solución que aborde las brechas críticas en la producción y distribución global de vacunas”, dijo el USTR.
Tai también discutió el tema con el Dr. Ruud Dobber, jefe de negocios de Estados Unidos en AstraZeneca, así como la decisión de la Casa Blanca de compartir hasta 60 millones de dosis de la vacuna COVID-19 de AstraZeneca con países necesitados. Lee mas
El USTR dijo que Tai y Dobber discutieron “el aumento de la producción de vacunas, los problemas de salud global y la exención propuesta”.
