La primera primera ministra de Suecia, la socialdemócrata Magdalena Andersson, renunció el miércoles después de menos de 12 horas en el cargo más alto después de que el Partido Verde renunciara a su coalición bipartidista, lo que avivó la incertidumbre política.
Pero Andersson dijo que le había dicho al presidente del parlamento que esperaba ser nombrada primera ministra nuevamente como jefa de un gobierno de partido único, y las perspectivas de que eso sucediera parecían bastante fuertes dado el apoyo de otros partidos.
El Partido Verde renunció después de que el parlamento rechazara el proyecto de ley de presupuesto de la coalición.
“Le he pedido al presidente que sea relevado de mis deberes como primer ministro”, dijo Andersson en una conferencia de prensa. “Estoy listo para ser primer ministro en un gobierno socialdemócrata de partido único”.
El Partido Verde dijo que la apoyaría en cualquier nuevo voto de confirmación en el parlamento, mientras que el Partido del Centro prometió abstenerse, lo que en la práctica equivale a respaldar su candidatura. El Partido de Izquierda también ha dicho que la respaldaría.
Si bien estos partidos no pudieron acordar un presupuesto, están unidos en el objetivo de evitar que los Demócratas de Suecia, un partido populista y antiinmigración, tengan un papel en el gobierno.
“El Partido del Centro le abrirá la puerta (a Andersson) para que sea primera ministra”, dijo su líder, Annie Loof, en Twitter.
“Nos aseguraremos, de nuevo, de que Suecia pueda tener un gobierno que no dependa de los demócratas suecos”.
Los moderados y demócratas cristianos de derecha de la oposición están respaldados por los demócratas suecos, pero no pueden obtener una mayoría en el parlamento.
Andersson sustituyó a Stefan Lofven como primer ministro como jefe de una coalición minoritaria bipartidista apoyada por los partidos de izquierda y centro. Pero esa alianza colapsó cuando el Partido del Centro se negó a respaldar el proyecto de ley de finanzas del nuevo gobierno.
Luego, el miércoles, el Parlamento aprobó los planes de gasto elaborados por tres partidos de la oposición, lo que llevó al Partido Verde a renunciar a la coalición y no dejó a Andersson otra opción que la de renunciar.
El presidente del parlamento decidirá ahora el siguiente paso en el proceso de encontrar un nuevo gobierno, pero lo más probable es que presente a Andersson para una nueva votación en los próximos días.
“Esperamos que los partidos Izquierda, Verde y Centro se abstengan en la próxima votación y, por lo tanto, aprueben efectivamente a Andersson como primer ministro nuevamente”, dijo el grupo bancario Nordea en una nota. “En otras palabras, el caos político se acaba mientras no ocurra nada más inesperado”.
Cualquiera que se convierta en primer ministro se enfrenta a grandes desafíos, y el próximo mes de septiembre se celebrarán elecciones nacionales.
La violencia de las pandillas y los tiroteos arruinan la vida en muchas ciudades importantes. Lee mas
La pandemia de COVID-19 expuso las lagunas en el tan aclamado estado de bienestar y el gobierno necesita acelerar el cambio a una economía verde si quiere cumplir con sus objetivos de cambio climático. Lee mas
Los bloques de centro izquierda y centro derecha están básicamente estancados en las encuestas.
El hecho de que Suecia haya tardado tanto en conseguir una mujer como primera ministra es vergonzoso para muchos en un país que introdujo el sufragio universal hace 100 años y ha defendido durante mucho tiempo la igualdad de género.
La vecina Noruega obtuvo su primera mujer líder hace 40 años. Sri Lanka fue el primer país en elegir a una mujer como primera ministra en 1960.
