Luego de un proceso en el que se evaluaron doce cotizaciones, el pasado 25 de julio se adjudicó finalmente a Plaza Mayor Medellín Convenciones y Exposiciones S A, el contrato de la logística para llevar a cabo la ceremonia de transmisión de mando del presidente electo Gustavo Petro y su vicepresidente Francia Márquez.
Según transcendió a la opinión pública, este contrato está tasado en 3 571 millones de pesos y empezará a ejecutarse el próximo 1 de agosto de 2022. Cabe resaltar que esta es la segunda vez consecutiva que Plaza Mayor estará al frente de la transmisión de mando presidencial en Colombia.
La primera vez que dirigió esta logística fue para el cambio entre Juan Manuel Santos e Iván Duque en el año 2018, cuando se ganaron la adjudicación de un contrato por un valor de 3 288 millones de pesos para toda la logística.
Es de resaltar que Plaza Mayor se dedica a proveer servicios de logística de eventos locales, nacionales e internacionales y ha participado en la logística de la Feria de las Flores de Medellín, visita del Papa Francisco y durante 2020 también se encargó de organizar las acciones logísticas para los eventos de presidencia y vicepresidencia.
Para 2022, el contrato para la transmisión de mando tiene cuatro subcategorías: transmisión de mando, con un valor de 2 400 millones de pesos; el presidente fuera de las sedes del Dapre, con un valor de 532 millones de pesos; el presidente en las sedes del Dapre, con un valor de 494 millones de pesos y Vicepresidencia de la República, con un valor de 143 millones de pesos.
Si bien ganarse esta licitación es un triunfo positivo para Plaza Mayor de Medellín, desde ya algunas voces ciudadanas se preguntan sobre qué irá a pasar con esos recursos que ingresarán y hacia dónde serán dirigidos, teniendo en cuenta que hay realidades en la ciudad que apremian y necesitan recursos públicos.
Sobre la posesión de Gustavo Petro
Sobre la posesión de Gustavo Petro el 7 de agosto en la ciudad de Bogotá, en la capital de Colombia comenzaron a disponer los dispositivos tecnológicos que facilitarán la transmisión y desarrollo del evento, al que se espera una asistencia masiva de más de 100 000 invitados.
Para cubrir la totalidad de esta población, se harán 55 actos culturales y participarán 600 artistas en escena y en actividades en cuatro plazas del centro de Bogotá mientras que la posesión oficial se hará en la Plaza de Bolívar.
«Se contará con el despliegue de más de 450 logísticos y el apoyo permanente de la Policía. Se tendrá siete pantallas conectadas a fibra óptica, se utilizarán más de 450 metros cuadrados de pantalla de alta resolución, 230 personas encargadas de apoyar la instalación de sonido, video, escenografía y más de 1 500 vayas serán utilizadas para el cerramiento perimetral», informaron desde el equipo logístico de la posesión.
Por todo este despliegue y despilfarro, muchos ciudadanos, incluidos simpatizantes del petrismo, están criticando el acto de posesión pues, durante la campaña, se había prometido en algunas ocasiones ser un gobierno austero y responsable con los recursos del país.
Tal vez por esto, la senadora de Colombia María Fernanda Cabal, trinó en las últimas horas criticando este acto de transmisión de mando.
«La posesión de Petro parece más la coronación de una monarquía absolutista, que el acto protocolario de un presidente en una democracia», trinó Cabal.
Algunos analistas afirman que con todo este despliegue lo que estaría buscando Gustavo Petro es alimentar su ego y para ello estaría utilizando los «actos culturales», con el fin de tener la mayor aglomeración de personas posibles pues sabe que con su solo discurso, no le alcanzaría para llenar una sola plaza.
