La mano amiga del cuestionado Alexander Vega Rocha mediante la cual el jefe de la Registraduría Nacional del Estado Civil decida salvar a Quintero del derecho ciudadano a revocar su mandato no notificándole al presidente por un motivo y otro, o quizás un salvavidas de Petro dejando transcurrir el tiempo para que entremos al año 2023 y así impedir que se pueda realizar la revocatoria al estar a menos de un año del final del periodo de gobierno del alcalde implicado. Estos serían dos de medios con los cuales se podría evitar esta revocatoria inminente.
Cabe aclarar que los ataques de Quintero hacia el proceso revocartorio carecen de sustento. Se trata de un movimiento espontaneo y ciudadano, desligado de partidos, y que busca el bienestar de la ciudadanía.
Todas las razones anteriores a las que puedan acudir el registrador o el presidente de la república conducen a un claro desacato y a una violación al derecho constitucional de los ciudadanos a revocar el mandato.
Solo por la vía ilegal podrá detenerse la revocatoria. En consecuencia los caminos que le quedan a Daniel Quintero para continuar evadiendo que su mandato sea puesto a consideración de la gente en las urnas, ambas son opciones antidemocráticas.