Esto consiste en la revisión de todos los ciudadanos que pueden ejercer su derecho al voto en el territorio nacional y en el exterior a través de los consulados, de esta manera se retiran de dicho censo personas fallecidas, que han adquirido de manera irregular su documento de identidad, ciudadanos que ingresaron a ser parte de las fuerzas armadas, entre otros colombianos que por su condición no pueden sufragar.
Sin embargo el hecho de que la Registraduría esté realizando esta labor en medio de los proceso de inscripción de cédulas y ad portas de los procesos electorales de 2022, ha generado muchas suspicacias, sobre todo teniendo en cuenta que el registrador nacional se ha visto envuelto en sospechas por el manejo de información y transparencia en los procesos democráticos.
El ente electoral informó que sacará más de 700 mil cédulas, correspondiente a personas fallecidas, desaparecidas, extranjeros y otros que no pueden participar y por ende no serán contados.
El Registrador explicó que ya se han eliminado 42 mil registros de venezolanos que incurrieron en irregularidades a la hora de tramitar su documento colombiano.
En enero finalizará este proceso de depuración.