fbpx
jueves, abril 25, 2024
InicioOpiniónDiego ArangoLa indolencia y el asombro

La indolencia y el asombro

Por Diego Arango O.

Son tantos y tan fuertes los hechos que suceden en Colombia que la gente ha perdido su capacidad de asombro. Somos una sociedad indolente, ya no se alarma casi por nada.

La prensa muchas veces abre edición en periódicos, noticieros radiales y televisivos con sucesos de sangre en que se involucra a uno o muchos muertos, sean estos por asesinatos de niños, de chicas, de personas por robarlos, por intolerancia y otros por venganza. Como es el caso de los policías muertos por la guerrilla mientras sus jefes se sientan cómodamente en Caracas a discutir la paz.

Un guerrillero, paramilitar o bandido confiesa cientos de crímenes y se vincula a Justicia y Paz JEP y termina absuelto, como también en conocidos casos con la investidura de padre de La Patria (Congresista). Otros guerrilleros o paramilitares confiesan haber matado a más de dos mil personas y ni nos asombramos.

Sorprendentemente el presidente Petro anuncia en su viva voz que los integrantes de “La Primera Línea”, una banda de facinerosos patrocinada por políticos de izquierda y quien sabe que otras fuentes de dudoso recaudo, serán liberados y pasarán a ser “gestores de paz”, cuando han destrozado la infraestructura de las ciudades, creado terrorismo, herido ciudadanos, policías y cobrado vidas. Corriendo nuestro país el riesgo de que estos hamponcetes se conviertan en los Colectivos armados, pagados con nuestros impuestos para atemorizar a la gente y hacer fechorías bajo el auspicio del Estado.

¡Por Dios! a dónde hemos llegado que no nos asombramos por tanta barbarie. ¿Será que el colombiano se ha acostumbrado a tanto crimen e impunidad? Yo me hago esta pregunta y no encuentro respuesta.

La insensibilidad colombiana ha tocado el corazón. No es que no se sienta rabia o quizás dolor o solidaridad con las víctimas, pero la verdad es que la indiferencia es superior. Algunos jueces en muchos casos terminan liberando a criminales porque más vale el centímetro normativo que el kilómetro de justicia.

Si todos reaccionáramos como debe ser ante tanta crueldad, tengan la seguridad que el Estado y la sociedad tendrían que cambiar, pero mientras escuchamos el noticiero con esos acontecimientos y a los pocos minutos esperamos la telenovela o el reality, la sociedad se convierte en cómplice mudo de todo el mal que se hace.

Es imperativo hacer un examen personal de conciencia, uno muy profundo en nuestros sentimientos y optar por una reacción, desde luego pacífica y cívica, pero contundente ante tanta desgracia. Yo quiero invitarlos a reflexionar en familia sobre el particular, que estos tiempos de encuentro fraterno nos sirvan para hacer una reflexión y tratar esta situación con los suyos y allegados. De esta manera nos iremos aproximando a la recuperación de nuestra capacidad de asombro, hoy pérdida, la misma que nos aleja del sentimiento humano y ciertamente solidario con la desgracia de los demás.

¡Recuperemos nuestra capacidad de asombro dejando atrás la indolencia!

[email protected]

ÚLTIMAS NOTICIAS

Abrir chat
💬 Soy INTELLECTA ¿En qué puedo ayudar?
INTELLECTA
Hola 👋 Soy INTELLECTA, el robot virtual de Inteligencia Artificial de IFMNOTICIAS.COM.
¿En qué puedo ayudarte?