Por Álvaro Ramírez González
Por fraude fue condenada Cristina Kirchner, vicepresidenta de la República Argentina, a seis años de prisión y además, una inhabilidad de por vida para ejercer cargos públicos.
Ese fallo es todavía apelable ante la Corte Suprema de Justicia, pero es altamente probable que sea ratificado. De todas maneras, anunció la actual expresidente de la República Argentina, que no se presentará más a procesos electorales.
No queda claro aún, cuando va a retirarse del cargo de vicepresidente del país como compañera de fórmula del actual presidente Alberto Fernández. Pero debe ser inmediato su retiro. Este es apenas uno de los tantos procesos que cursan en los tribunales contra Cristina Kirchner, por muchos delitos que son conexos al abuso de poder y que la han convertido en una mujer rica.
Una serie de licitaciones de obras públicas, mal adjudicadas y entregadas a contratistas amigos, y aliados de los Kirchner, son la base de este histórico fallo. Falta muy poco para que Argentina vaya a elecciones para escoger a su nuevo presidente y reemplazo de Alberto Fernández.
El actual gobierno Fernández- Kirchner está muy desprestigiado y apenas tiene una aprobación del 17 % y la situación económica es muy mala. Termina Argentina este año, con una inflación del 100 % anual y con una pobreza disparada. Asimismo, una devaluación en 2022, del 39 %. La más alta de todo el vecindario.
Es muy claro que la izquierda va a perder las próximas elecciones presidenciales por la pésima gestión de Fernández- Kirchner. Aún la derecha no tiene ni candidato único, ni un programa de gobierno, las encuestas de intención de voto muestran un viraje
electoral del pueblo argentino hacia la derecha.
En febrero del próximo año, Cristina Kirchner cumple 70 años y por esa razón no va a ir a la cárcel. Pagará su condena en su casa. El gran patrimonio que obtuvo Cristina Kirchner, producto de esa brutal y abusiva corrupción, está hoy a nombre de los hijos.
Por esa razón vienen muchos procesos para tratar de quitarles muchos bienes que no tienen trazabilidad alguna, distinta a ser testaferros de su madre. Pierde eso si la pensión presidencial como castigo por esa condena. Termina así una lucha muy larga contra los Kirchner
Desde que su esposo, el fallecido Néstor Kirchner, ocupó la presidencia de Argentina, se iniciaron los escándalos y las demandas correspondientes, por abuso de poder y enriquecimiento ilícito. Esta condena es una luz, al final del túnel que hace tantos años viene sufriendo el pueblo argentino.
Es el momento de castigar a esa izquierda kirchnerista ladrona, que tanto ha empobrecido a la Argentina.
