Un juez federal otorgó el miércoles a John Hinckley, el hombre que disparó e hirió al presidente Ronald Reagan y a otros tres en un intento de asesinato de 1981, liberación incondicional de las restricciones restantes que enfrentó, informaron los medios estadounidenses.
Durante una audiencia en Washington, el juez de distrito estadounidense Paul Friedman levantó las restricciones de viajes y uso de Internet contra Hinckley, quien ha estado viviendo solo en Williamsburg, Virginia, informó Fox News. La orden de Friedman entrará en vigencia el 15 de junio, informó.
Durante una audiencia en septiembre, Friedman dijo que otorgaría la liberación incondicional de Hinckley, pero les daba a los fiscales más tiempo para monitorear a Hinckley mientras hacía la transición a vivir solo después de la muerte de su madre.
Friedman en ese momento dijo que los problemas de salud mental de Hinckley estaban “en remisión” y que ya no representaba un peligro.
En 2016, Hinckley fue dado de alta de un hospital psiquiátrico donde fue tratado por depresión y psicosis y se le permitió mudarse a una comunidad cerrada en Williamsburg para cuidar a su madre anciana, quien murió en agosto de 2021.
Desde que dejó el hospital, Hinckley ha cumplido con las condiciones ordenadas por la corte y se ha mantenido mentalmente estable y asintomático, según documentos judiciales.
“Hinckley no ha hecho amenazas verbales, y no ha exhibido ningún comportamiento indicativo de daño a sí mismo, a otros o a la propiedad de los demás. No ha exhibido comportamientos disruptivos o problemáticos”, escribieron los fiscales federales al tribunal en apoyo de su liberación.
En septiembre, la hija de Reagan, Patti Davis, escribió en un artículo de opinión en el Washington Post que se opuso a la liberación de Hinckley, diciendo que no creía que él sintiera remordimiento.
El 30 de marzo de 1981, Hinckley le disparó a Reagan en un intento de asesinato fuera del Hotel Washington Hilton. Reagan sufrió un pulmón perforado pero se recuperó.
Otros heridos incluyeron al secretario de prensa de la Casa Blanca James Brady, al agente del Servicio Secreto Timothy McCarthy y al oficial de policía de Washington Thomas Delahanty.
Hinckley fue declarado inocente por razón de locura en un juicio con jurado de 1982.
