La Administración Federal de Aviación de EE. UU. (FAA) prohibió el jueves a Virgin Galactic volar su SpaceShipTwo hasta que la agencia apruebe su informe final de investigación de percance de su vuelo de julio o determine que los problemas no afectan la seguridad pública.
La FAA confirmó este miércoles que investigaba una desviación en el descenso del vuelo del avión cohete Virgin Galactic que llevó al multimillonario británico Richard Branson al borde del espacio el 11 de julio.
La FAA, responsable de proteger al público durante el lanzamiento y reentrada del transporte espacial comercial, dijo que “SpaceShipTwo se desvió de su autorización de Control de tráfico aéreo cuando regresó a Spaceport America” en Nuevo México.
“Virgin Galactic no puede devolver el vehículo SpaceShipTwo a vuelo hasta que la FAA apruebe el informe final de la investigación del percance o determine que los problemas relacionados con el percance no afectan la seguridad pública”, dijo la agencia.
En respuesta a la declaración de la FAA, Virgin Galactic dijo que estaba “abordando las causas del problema y determinando cómo evitar que esto ocurra en misiones futuras”.
La compañía agregó que la desviación en el vuelo de julio conocido como Unity 22 era “una ruta de vuelo controlada e intencional que permitió a Unity 22 alcanzar con éxito el espacio y aterrizar de manera segura en nuestro puerto espacial en Nuevo México. En ningún momento los pasajeros y la tripulación corrieron peligro. . “
Agregó que ha “estado trabajando en estrecha colaboración con la FAA para respaldar una revisión exhaustiva y una resolución oportuna de este problema”.
Anteriormente, Virgin Galactic dijo que “el vuelo cayó por debajo de la altitud del espacio aéreo … durante una corta distancia y tiempo (1 minuto y 41 segundos)”.
El miércoles, Virgin Galactic dijo que estaba planeando otro vuelo de SpaceShipTwo desde Nuevo México y apuntando a una ventana de vuelo a fines de septiembre o principios de octubre, a la espera de verificaciones técnicas y del clima. Ese vuelo llevará a tres tripulantes de la Fuerza Aérea Italiana y el Consejo Nacional de Investigación, agregó.
Branson fue uno de los seis empleados de Virgin Galactic que participaron en el vuelo de julio, elevándose más de 50 millas (80 km) sobre el desierto de Nuevo México. Había promocionado la misión como un precursor de una nueva era de turismo espacial y dijo que la compañía que fundó en 2004 estaba lista para comenzar sus operaciones comerciales el próximo año.
