Por : Álvaro Ramírez González
Quedaron ya prácticamente consolidados los dos grupos: centro izquierda, el Grupo de la Esperanza y centro derecha, el Grupo de la Experiencia.
Alejandro Gaviria finalmente aterrizó y entendió que ya sin el respaldo liberal, que lo lanzó a la campaña, debería unirse a un grupo porque su candidatura presidencial en solitario no iba para ninguna parte. No tenía futuro.
Sergio Fajardo, el segundo en popularidad después de Juan Manuel Galán, tendrá que enfrentar un proceso fiscal muy duro por Hidroituango, que le pone duras limitaciones reputacionales y políticas. Ese grupo tiene claro que no acompañará en estas elecciones a Petro, como ya lo hicieron antes algunos de ellos como Robledo, los Verdes, De la Calle y Cristo.
La consulta de marzo, va a definir cuál de los seis precandidatos será el candidato único de la Esperanza para la primera vuelta electoral. Al otro lado del centro, está el Grupo de la Experiencia con Peñalosa, Fico, Char, Gutierrez, Dilian Francisca y Barguil. Son como se titulan, personajes con exitosa experiencia en cargos de alta gerencia como las alcaldías de Bogota, Medellín, Barranquilla, el Valle del Cauca y el Ministerio de Hacienda.
Al mismo lado en el centro derecha, está ya definida la candidatura oficial de Óscar Iván Zuluaga, por el Centro Democrático. Esta muy cercana, la integración de Zuluaga a este grupo. También están en ese lado, los partidos Mira, Colombia Justa y Libres y las Iglesias Cristianas.
Es indudable que hay mucha más fuerza electoral en este grupo porque están con él, los congresistas del CD, de Cambio Radical, del partido de la U, del Partido Conservador, del Mira, y de Colombia justa y libres. ¡Un batallón de congresistas!. Y también se une a esa campaña el expresidente Alvaro Uribe, el mayor elector de Colombia.
Ambos grupos son de centro. Los unos de izquierda y los otros de derecha. Pero a ambos grupos los une una consigna: no acompañar nunca a Gustavo Petro.
Queda Petro entonces con una pequeña división, solo en la extrema izquierda. Y Rodolfo Hernandez que gravita en solitario con su discurso de “parar la robadera y el despilfarro“, que le ha dado tanto resultado como que está de segundo en las encuestas.
Pero la consolidación de estos dos grupos va a mover muy duro las encuestas en estos meses, y hace cada vez más distante la llegada de Petro al poder.
Para la segunda vuelta electoral, es muy fácil que ambos grupos se alíen ante la amenaza de Petro y aliados, de lejos lo barren.
No tienen otra salida.
¡No lo descarten!
