Los equipos de bomberos en el sur de España están mirando al cielo en busca de las muy necesarias lluvias que se esperan el lunes y que esperan que puedan ayudar a extinguir un gran incendio forestal que ha devastado 7.700 hectáreas (19.000 acres) en cinco días y ha desplazado a unas 2.600 personas de sus hogares.
Las autoridades describen el incendio en Sierra Bermeja, una cadena montañosa en la provincia de Málaga, como un incendio de sexta generación del tipo extremo provocado por el cambio climático en el planeta. Los “mega incendios” son eventos catastróficos que matan, oscurecen grandes áreas y son difíciles de detener.
En España, eso se combina con una dinámica creciente de zonas rurales que pierden población, lo que lleva a una gestión más deficiente de los bosques y la acumulación de material combustible.
“Nos enfrentamos al incendio más complejo conocido por los servicios de extinción forestal en los últimos años”, dijo a la prensa el domingo por la noche Juan Sánchez, director del servicio antiincendios de la región sur de Andalucía.
“Hemos estado hablando mucho de las consecuencias del abandono del medio rural y el cambio climático”, agregó Sánchez. “Los estamos viendo hoy”.
El área afectada se ha duplicado desde el sábado, cuando las autoridades dijeron que las llamas estaban contenidas dentro de un perímetro de alrededor de 40 kilómetros (25 millas). Una nube de ascuas condujo a un nuevo punto caliente de incendio poco después, provocando un nuevo incendio forestal que finalmente se unió al anterior, dijeron expertos el domingo. El lunes por la mañana, el perímetro había alcanzado los 85 kilómetros (unas 50 millas).
La agencia meteorológica española, AEMET, había pronosticado lluvias en el área para el lunes más tarde, pero no estaba claro si las lluvias serían suficientes para sofocar las llamas.
Cerca de 500 bomberos trabajaban en turnos en tierra, asistidos por 50 aviones y helicópteros que arrojaban agua desde el aire. A ellos se unieron el domingo 260 miembros de una unidad de emergencia militar. Un bombero de 44 años murió el jueves mientras intentaba apagar el incendio.
Alrededor de 2.600 residentes han sido reubicados en total. La mayoría de los evacuados de partes de la ciudad turística de Estepona habían podido regresar a sus hogares el lunes, pero 1.700 personas seguían desplazadas de seis aldeas y alojadas en otras localidades, incluido un pabellón en la ciudad de Ronda.
Los científicos del clima dicen que hay pocas dudas de que el cambio climático causado por la quema de carbón, petróleo y gas natural está provocando eventos más extremos, como olas de calor, sequías, incendios forestales, inundaciones y tormentas.
En España, los datos oficiales mostraron que el país había experimentado menos incendios en lo que va de año que el promedio durante la última década, pero el número de grandes incendios forestales, los que afectaron a más de 500 hectáreas (1.200 acres), fue de 19 en los primeros ocho. meses de 2021 en comparación con 14 en promedio para el mismo período desde 2011.
Eso también ha llevado a una mayor área de arbustos y bosques quemados: 75,000 hectáreas (186,000 acres) al 5 de septiembre, en comparación con un promedio de 71,000 hectáreas en promedio en los años anteriores, mostraron datos del Ministerio de Transición Ecológica.
