Un comerciante agredido y su local vandalizado por jóvenes que protestaban ayer en medio del Paro Nacional, deja a una gran parte de la sociedad medellinense indignada por la falta de control de las autoridades y la complacencia pasmosa del Alcalde de Medellín, Daniel Quintero, según lo afirman los comerciantes de la zona.
En momentos en que los manifestantes equipados con tulas de la Alcaldía de Medellín pintaban una de las estaciones del MetroPlus, los comerciantes salieron a reprochar la actitud de destrucción del mobiliario público a los manifestantes, quienes reaccionaron violentamente y agredieron a los comerciantes. A uno de ellos le derramaron un cubo de pintura encima, mientras que la turba se fue en contra de su local.
Tras el ataque con palos y piedras, varios comerciantes debieron encerrarse para proteger su integridad, mientras que la policía hizo caso omiso al llamado de quienes estaban siendo agredidos. Según denuncian los comerciantes, la respuesta de la policía, fue desconcertante, pues les notificaron que “nada podían hacer, porque el alcalde apoyaba esas acciones”
A los agredidos les llamó la atención que los marchantes tenían tulas de la Alcaldía de Medellín, que según denuncian estaban nuevas, y se preguntan cual es la relación que el alcalde Daniel Quintero tiene con los promotores de estos actos de violencia, mientras recuerdan que estos actos no se veían antes en la ciudad.
A los denunciantes les parece muy raro el empoderamiento que han tenido estos grupos de manifestantes y no olvidan que el alcalde Daniel Quintero, hasta les hizo tablado y les dio refrigerios a comienzo de año mientras vandalizaban instalaciones bancarias y atentaban contra el sistema de transporte de la ciudad.
