Como un irrespeto, falta de organización, ineptitud administrativa y hasta irresponsable; ha sido calificado por el personal de salud convocado desde ayer para que hoy desde las 6 de la mañana se aglutinara en la Unidad de salud de Belén, para ser vacunados.
Y es que cuando ya avanza la segunda etapa del Plan Nacional de Vacunación y en Medellín ya se vacuna a los mayores de 75 años en las IPS adcritas a las EPS, los médicos, enfermeras y personal de salud y atención de primera línea, de responsabilidad del municipio, no ha podido ser vacunado en su totalidad.
Es así como los galenos y todo el personal faltante de primera linea fueron citados para hoy, convirtiéndose en un calvario, pues las filas alcanzaron las 3 cuadras, en medio del caos, un total desorden y, para ellos, una falta de respeto.
La falta de un censo y de organizar al personal de salud por lotes horarios o por algún tipo de orden; hizo que se desbordara la capacidad de atención en la vacunación. “Cuando comenzaron a llegar y a hacer fila, solo había 3 personas vacunando” dice uno de los médicos afectados quien llamó la atención de que “mientras estamos aquí, en mi hospital tengo a los pacientes sin quien los atienda”.
Lejos de solucionarse el problema en la mañana, la situación se agravó al producirse un algomeramiento tal que ya vulneraba los principios de bioseguridad y distanciamiento y ya se contaba por cientos el número de personas de primera línea que esperaba la vacuna a lo largo de varias cuadras.
Los médicos, enfermeras y personal de asistencia de primera línea presente, no solo manifestaron su inconformidad, sino que denunciaron la improvisación de la Alcaldía de Medellín y se quejaron de la incapacidad que ha demostrado el Alcalde Daniel Quintero y la Secretaría de Salud, para dar cumplimiento a la vacunación.
Si bien la mayoría de ellos estaban por la segunda dosis, habían personas que siendo de primera línea no había sido vacunada, pese a los anuncios del alcalde y a los balances optimistas que se revelan sobre la vacunación en la ciudad. “Lo curioso es que mientras avanza ya la segunda etapa, el municipio no ha terminado la primera y engañan a la gente, cuando lo que estamos expuestos somos nosotros”, se queja uno de quienes debieron esperar por mas de tres horas para ser atendidos.
A la hora de publicación de este artículo, las filas interminables continuaban en la Unidad de Belén, según se pudo constatar.
