Las autoridades de salud de Corea del Sur dijeron el martes que considerarían el uso de kits de autoprueba de coronavirus a pesar de su precisión relativamente baja, después de que el nuevo alcalde de Seúl pidió su aprobación.
El gobierno se había mostrado reacio a permitir los kits de autoevaluación, citando su menor precisión que las pruebas de PCR estándar de la industria y las pruebas rápidas administradas por especialistas que ya están en su lugar. La posibilidad de falsos negativos es mayor, dicen las autoridades, ya que una carga viral alta en los conductos nasales a menudo es esencial para asegurar un resultado confiable.
Pero algunos jefes y expertos de gobiernos locales han destacado la necesidad del uso de kits de autoevaluación como herramienta complementaria en las últimas semanas en medio de los temores de una posible cuarta ola de brotes de COVID-19.
Oh Se-hoon, quien se convirtió en alcalde de la capital, Seúl luego de las elecciones especiales de la semana pasada, pidió al Ministerio de Seguridad de las Drogas que apruebe esos kits para ser utilizados en hogares, restaurantes, tiendas e instalaciones religiosas como un dispositivo rápido y fácil para detectar posibles infecciones. .
Oh había culpado al gobierno por no contener una tercera ola de COVID-19 y reducir las dificultades de los propietarios de pequeñas empresas al apegarse a bordillos de distanciamiento ineficaces.
“Es engorroso mantener el sistema antivirus como está. Necesitamos probar nuevas ideas y cambiar nuestra forma de pensar ”, dijo Oh en una reunión de gabinete, la primera a la que ha asistido desde que asumió el cargo.
“Insto al Ministerio de Seguridad de los Medicamentos a que conceda la aprobación para el uso de kits de autoevaluación en un futuro próximo”.
El ministro de Seguridad de los Medicamentos, Kim Gang-lip, dijo que los kits podrían ser útiles si se usan de manera limitada, pero las reglas actuales permiten productos con una precisión del 90%, en comparación con la precisión del 98% probada por las pruebas de PCR.
“Espero hacer un buen uso de los kits que tienen un aspecto positivo como herramienta complementaria … si se tienen en cuenta sus efectos secundarios”, dijo Kim en respuesta en la reunión del gabinete, prometiendo acelerar el proceso de evaluación.
Las discusiones se produjeron mientras Corea del Sur lucha contra un aumento de las infecciones en racimo, principalmente en el área metropolitana de Seúl, lo que llevó a las autoridades a volver a imponer una prohibición a los clubes nocturnos, bares de karaoke y otras instalaciones de entretenimiento nocturno, que entró en vigencia el lunes.
La Agencia de Prevención y Control de Enfermedades de Corea informó 542 nuevos casos de COVID-19 hasta el lunes, lo que marca una ligera caída debido a menos pruebas durante el fin de semana después de que el recuento diario se disparó por encima de 600 durante seis días consecutivos.
El total de infecciones en Corea del Sur asciende a 110.688 desde que comenzó la pandemia, con 1.775 muertes.
