Los lideres tradicionales del conservatismo, siguen con la idea de adoptar algunas medidas para recuperar las ideologías de la colectividad que se han visto traicionadas por los actuales dirigentes del tradicional partido.
El Movimiento de Salvación Nacional fue fundado por Álvaro Gómez Hurtado como una disidencia del conservatismo, y es por esto que su actual director, Enrique Gómez Martínez, invita a los lideres del conservatismo tradicional y a las bases del partido a considerar el adherirse a este movimiento.
Muchos militantes piensan que el conservatismo, bajo la dirección de Carlos Andrés Trujillo, se vendió al gobierno de Petro solo por aspiraciones burocráticas e intereses personales.
Entre tanto, lideres del conservatismo que guardan su identidad, califican incluso a Trujillo como el sujeto que traicionó los ideales conservadores y que solo se ha dedicado a atesorar contratación, red de burocracia, y con ello, nivel de poder que no defiende propiamente banderas del conservadurismo.
Es una practica que Trujillo ha realizado en el municipio de Itagüí, donde fue alcalde, dejando una serie de corruptelas en la administración que aún hoy están vigentes.
Se ha conocido que en las reuniones que se han dado, son muchos los militantes que están dispuestos a irse, pero buscan soluciones jurídicas para conservar sus curules sin ser acusados de transfuguismo.
Además, existe la posibilidad de que se pueda citar a una asamblea extraordinaria donde se intentaría cambiar la actual junta directiva, para permanecer dentro de la colectividad y poder retomar los ideales conservadores desde el interior, ya que son muchos los que consideran que irse del partido, es entregar las banderas a quienes lo han traicionado.
Lo cierto es que desde el momento en que Carlos Andrés Trujillo decidió que el Conservador es un partido de gobierno, que apoya en el Congreso todas las iniciativas presentadas por Petro, les dio una estocada a los ideales conservadores, a las bases y militantes que no se explican como la colectividad conservadora puede arrodillarse ante un gobierno de izquierda.
Es casi seguro que las próximas elecciones pasarán una muy alta factura al partido Conservador, de continuar por el camino que se ha tomado. Es por esto que muchos ven a Salvación Nacional, como un salvavidas para el conservatismo.
