La elección de Miguel Efraín Polo como Magistrado de la Corte Constitucional dejó al descubierto no solo las tensiones internas en el Congreso, sino también el creciente alcance de Gustavo Petro en la estructura institucional del país. El proceso, que comenzó con un polémico empate entre Polo y Claudia Dangond, terminó inclinándose a favor del candidato del Gobierno gracias a una serie de movimientos estratégicos y, sobre todo, a una fractura dentro del Partido Liberal liderado por César Gaviria, según las fuentes confidenciales de IFMNOTICIAS.
La controversia de la primera votación
El proceso inició con un empate inesperado entre los dos candidatos tras la primera votación, empañada por el hallazgo de votos adicionales sin marcar, lo que generó sospechas de fraude y obligó a una nueva ronda al día siguiente. Mientras Dangond parecía contar con un respaldo sólido y amplio en el Congreso, la balanza se volcó de manera sorpresiva en favor de Polo en la segunda votación, en un resultado que dejó más preguntas que certezas.
Los esfuerzos del Gobierno Petro
El presidente Gustavo Petro no ocultó su satisfacción por el nombramiento de Polo, sin duda, un aliado clave para sus intereses, según se desprende del mensaje en su cuenta de X en el que prácticamente, reclama como suyo el triunfo. Desde el inicio, el mandatario movió sus fichas para asegurar que el Magistrado electo, a quien se señala de ser identificado con su corriente política, lograra llegar a uno de los órganos más importantes del sistema de equilibrio de poderes en Colombia.
Según las fuentes confidenciales, los movimientos al interior del Congreso por parte de militantes del Pacto Histórico no pararon hasta última hora, promoviendo y defendiendo al candidato Polo, ya hoy Magistrado electo; lo que fue interpretado por los partidos de oposición, como presiones indebidas del gobierno a la libre actividad legislativa, algo que vienen denunciando desde hace ya varios meses no sólo con esta situación sino con otros proyectos
El quiebre en el Partido Liberal
Uno de los factores decisivos en el triunfo de Polo fue la división dentro del Partido Liberal. Aunque César Gaviria, jefe natural de la colectividad, ha mantenido una postura crítica frente al Gobierno Petro y así lo reafirmó tras su reelección como Presidente del partido. Su hijo Simón Gaviria jugó un papel crucial en inclinar la balanza. Simón, quien ha expresado su cercanía personal con Miguel Polo y su familia, envió mensajes claros de respaldo al candidato petrista a miembros clave de la bancada liberal, lo que derivó en un giro inesperado en las votaciones.
La contradicción entre padre e hijo terminó favoreciendo los intereses de Petro, ya que el Partido Liberal fue determinante para garantizar los votos necesarios para que Polo superara a Dangond, considerada inicialmente la favorita.
Implicaciones para el equilibrio de poderes
La elección de Miguel Polo consolida, aparentemente, el control que el Gobierno Petro ha ido ganando en instituciones que, en teoría, deberían operar con independencia. Con un Procurador, una Defensora del pueblo y una Fiscal percibidos como cercanos al Ejecutivo; la llegada de Polo a la Corte Constitucional refuerza la idea de la influencia del Presidente en un órgano que hasta ahora se había convertido en una piedra en el zapato para sus reformas más ambiciosas.
El nombramiento de Polo es un triunfo político para Gustavo Petro, pero también un reflejo de las dinámicas internas del Congreso y las fracturas en los partidos tradicionales como el Liberal. Esta elección, más que un proceso institucional, parece haber sido el resultado de negociaciones y contradicciones que revelan cómo el equilibrio de poderes en Colombia enfrenta un desafío creciente.
La posición de Miguel Polo
Por su parte, el nuevo Magistrado de la Corte Constitucional se refiere a él mismo, como un hombre de derecho sin matices políticos que lleva 18 años trabajando en la Corte donde comenzó como auxiliar segundo y hasta ayer era Magistrado Auxiliar, por lo que señala que su independencia está comprobada a lo largo de los años de trabajo en la Corte. Reconoce que desde diferentes sectores contrarios a la visión que se tiene hoy ha sido señalado de ser conservador en los procedimientos y el cuidado de la Constitución, contrario a los que piensan que es de corte liberal, libre pensante o cercano al Presidente.
Miguel Polo reafirma que su único espíritu y sueño es custodiar la Carta Magna y que, como lo hicieron los otros dos candidatos, lo que hizo durante el proceso de campaña, fue hablar con los diferentes sectores políticos representados en el Congreso que son el reflejo del país; para exponerles su posición ganándose el afecto de algunos sectores más que otros. Polo no está de acuerdo con las estigmatizaciones y dice que la responsabilidad es cuidar la Constitución para que él siga el camino del Estado de derecho.