Por Saúl Montes López
En días pasados el alcalde de Medellín, Daniel Quintero dio unas polémicas declaraciones sobre la presencia una nueva cepa del coronavirus que circulaba en la ciudad, sin embargo, para ese entonces no existía prueba científica de dicha presencia en la capital antioqueña.
Luego de investigaciones realizadas por el laboratorio One-Health (de la Universidad Nacional de Colombia, Medellín) y el Laboratorio Departamental de Antioquia en asocio con el Instituto Nacional de Salud, se logró determinar que en el departamento circulaban las variantes B.1.1.7 (Reino Unido) y P1 (Brasil), más no una “nueva cepa”.
Así lo aclaró Juan Pablo Hernández, director del Laboratorio Genómico One Health, quien indicó que la pandemia que enfrenta el mundo actualmente es debido a la cepa del SARS-CoV-2 y precisó que las variantes van relacionadas a linajes y mutaciones de la misma. Es decir, que una nueva cepa estaría totalmente ligada a un nuevo grupo de los coronavirus.
Según los estudios, las variantes hablan sobre el refuerzo que todo virus en circulación adquiere. “La identificación de esas variantes hace parte de las explicaciones del incremento exponencial en el número de casos de pacientes diagnosticados con Covid y simultaneo el incremento en la ocupación de camas UCI, eso explica la agresividad de este tercer pico de la pandemia”, afirmó el gobernador (e) de Antioquia, Luis Fernando Suárez.
Actualmente, las autoridades están a la espera de los resultados que arrojarían las actuales medidas de restricción que rigen en todo el departamento de Antioquia para lograr la reducción de los casos de contagio en este tercer pico.
