Un alcalde en el centro de Venezuela ha comenzado a colocar símbolos de advertencia rojos en las casas de las personas con COVID-19 y también amenazó con recortar las ayudas sociales para quienes rompan la cuarentena.
“Estamos protegiendo a nuestra gente”, dijo Luis Duque, alcalde del municipio de Sucre en el estado de Yaracuy, señalando un letrero de papel blanco en una casa con un círculo rojo y una línea trazada.
“Esto indica que hay un caso de Covid o un caso sospechoso de Covid, por lo que la gente está alerta”, agregó en un video publicado esta semana en su cuenta de Instagram.
Al decirle a la radio local que se necesitaban medidas radicales mientras Venezuela abordaba una segunda ola del coronavirus, Duque dijo que los beneficios que incluyen la entrega de alimentos y el gas para cocinar podrían reducirse si las personas no cumplen con las órdenes de cuarentena.
La medida de Duque, miembro del gobernante Partido Socialista del presidente Nicolás Maduro, generó acusaciones de discriminación.
“Debemos denunciarlo y, además, desearle buena salud para que no tenga que marcarse”, tuiteó Tamara Suju, abogada de derechos humanos.
El país sudamericano está experimentando un resurgimiento del virus luego de un primer pico en agosto pasado, con 1.526 nuevos casos y 15 muertes reportadas el martes.
Yaracuy reportó 186 nuevos casos el martes, el cuarto entre los 23 estados y el distrito capital, según muestran los datos oficiales.
Duque dijo que su municipio también multaría a cualquiera que desobedezca la cuarentena con el equivalente a $ 9, el equivalente a varios meses de salario mínimo en una Venezuela hiperinflacionaria.
Duque dijo a una radio local que si alguien consideraba que las medidas eran inconstitucionales, podría impugnarlas en los tribunales, pero que las reglas eran obligatorias hasta cualquier posible fallo en su contra.
